Uno de los desarrollos de Google que más controversia han causado recientemente es Project Loon, que son globos de polietileno que se elevan en el cielo e integran dispositivos que permiten crear una red inalámbrica para llevar Internet a zonas que no tienen conectividad. Google ofreció más detalles sobre el funcionamiento de estos globos.
En GPS 6.0, Sameera Ponda, ingeniero aeroespacial de Google, mención que Loon es parte de Google [x], donde se llevan a cabo desarrollos de artículos que “parecen de ciencia ficción”, como Google Glass, Google Self Driving Car (auto que se maneja solo) y Project Loon.
Con Loon se debe solucionar el problema de conectividad escasa en todo el mundo. Según Google, dos de cada tres personas no tienen acceso a la red.
El proyecto establece que el acceso a Internet sea provisto por globos que vuelen en la estratósfera de zonas donde la red no existe.
Con los globos se puede tener más flexibilidad que con satélites. Por ejemplo, establecer una red móvil que sea desplegada en caso de catástrofes naturales, además de que con los globos es más simple realizar reparaciones en el sistema.
El reto era crear globos que sean duraderos, manejables y económicos; también se necesitaban planear y controlar algoritmos que coordinen el despliegue de los globos.
Los globos vuelan a 20 mil metros, que es el doble de la altura a la que vuelan los aviones. Cada uno es diseñado para permanecer arriba más de 100 días, además son resistentes a las condiciones del tiempo, ya sean temperaturas muy bajas o radiación UV.
En los globos hay energía renovable para nutrir los transmisores. También pueden cambiar de altitud para alcanzar alguna corriente de aire; todo esto se hace por medio del software que monitoriza el sistema y el estado del globo.
La parte superior tiene helio y la inferior tiene aire, en caso de ser necesario, se pude agregar o sustraer aire para cambiar la altitud.
Los globos se controlan desde la tierra y se pude ver información en tiempo real de la flota de globos desplegados; para evitar problemas, ingenieros de vuelo controlan el desplazamiento de los globos y se coordinan con las autoridades de aviación para ello.
Las flotas con miles de globos pueden ser planeados para semanas hacia adelante, y la trayectoria se puede cambiar para llevar Internet hacia una zona que necesite conectividad.
El proyecto está en desarrollo y se espera que pronto pueda ser aplicado en más regiones, además de superar retos como el que la energía en los transmisores no se agote en caso de que no haya suficiente luz solar para nutrir las celdas.
Para conocer más sobre Loon se puede visitar este enlace.