Hace unos días recibí un correo en donde se me indicaba que Amazon quería confirmar datos sobre mi cuenta. Llevo años comprando libros en ese portal y nunca antes había recibido una petición, por parte de Amazon, para que les mandara información sobre mi persona (pasaporte, mi dirección física, comprobante de domicilio). Para colmo, cosa que me pareció más extraña, pedían que mandara esos documentos vía fax.
Decidí investigar porque pensé que se trataba de un clásico acto de phishing, pero no fue así. Las direcciones de correo eran de amazon.com. De todas maneras mandé un mensaje indicándoles el correo que había recibido, con la referencia correspondiente y me contestaron a las 12 horas (como prometen). Les pregunté a cuenta de que me habían bloqueado, que qué estaba mal con mi cuenta. Esta fue en breve su respuesta:
“En Amazon hacemos revisión rutinaria de las cuentas de los clientes para asegurarnos que cumplen con las leyes aplicables a las transacciones comerciales. Es una medida proactiva para asegurar la seguridad su cuenta de Amazon.
Recolectamos información sobre nuestros clientes como nombre, dirección y fecha de nacimiento. Nuestra petición de información no sugiere ninguna acción errónea de su parte. Usaremos esta información solamente para confirmar su identidad. Su privacidad es muy importante para nosotros.
No podemos aceptar documentos por correo electrónico. Por favor, mande la documentación requerida a nuestra línea de fax segura 1-206-XXX-XXXX.
Si usted no tiene acceso a una máquina de fax en su casa u oficina, puede quizás usar alguna en la biblioteca local o en un centro de copiado. Tal vez quiera usar un servicio de fax en línea, muchos de los cuales son gratuitos.”
Así pues, sí, Amazon puede bloquear tu cuenta. Mandé los datos correspondientes y al día siguiente me dijeron que todo estaba arreglado. Cabe decir que Amazon advierte (al menos en el sitio en español en México), que no se podrá ingresar a la cuenta mientras no concluya la revisión de la misma por su parte.
Cabe señalar que parece que este procedimiento no afecta si has comprado libros electrónicos, es decir, puedes acceder a ellos desde tu Kindle o los programas para tu tablet, computadora o teléfono.
En ocasiones, por lo menos para mí, resulta molesto que me anden pidiendo datos. En este momento que nos ha tocado vivir, que hay que estar “a las vivas” porque no falta quien te quiera sacar ventaja o robarte, es importante ver toda petición de información de manera sospechosa y antes de mandar nada a quien pide la misma, hay que investigar si de verdad es una petición legítima.