¿Quién dijo que la ciencia no puede ser divertida? Tan disparatada y única como siempre, la entrega de los Ig Nobel 2015 ha vuelto a celebrarse en el Teatro Sanders de la Universidad de Harvard, en su vigésima quinta edición.
Bajo el lema “primero hacer reír y después hacer reflexionar”, los organizadores pretenden celebrar lo inusual, honrar lo imaginativo y estimular el interés de todos por la ciencia y la tecnología.
El nombre Ig Nobel es un juego con la palabra Ignoble, que en castellano es Innoble que se caracteriza por la vileza, bajeza o mezquindad.
Este año han destacado un estudiante de la Universidad de Cornell, que ha dejado que abejas picaran su cuerpo para averiguar que los lugares más dolorosos eran las fosas nasales, el labio superior y los genitales: “Con una picadura en la nariz te duele todo el cuerpo”. También ha llegado a la cumbre un equipo de investigadores que han averiguado que es posible que un mismo padre engendre a 888 hijos.
Aquí los galardonados en su edición de 2015:
Química: Callum Ormonde, Colin Raston, Tom Yuan, Stephan Kudlacek, Sameeran Kunche, Joshua N. Smith, William A. Brown, Kaitlin Pugliese, Tivoli Olsen, Mariam Iftikhar, y Gregory Weiss. Por inventar una receta química que permite descocer parcialmente un huevo.
Física: Patricia Yang, David Hu, Jonathan Pham y Jerome Choo. Por comprobar el principio biológico de que todos los mamíferos vacían sus vejigas en unos 21 segundos (más menos 13 segundos).
Literatura: Mark Dingemanse, Francisco Torreira, y Nick J. Enfield. Por descubrir que la palabra ¿eh? (o sus equivalentes) parece existir en todos los lenguajes humanos – y por no estar muy seguros de por qué.
Gestión: Gennaro Bernile, Vineet Bhagwat, y P. Raghavendra Rau. Por descubrir que muchos directores de empresas y negocios desarrollaron una querencia por aceptar riesgos cuando experimentaron desastres naturales (como terremotos, erupciones volcánicas, tsunamis, e incendios forestales) que para ellos no tuvieron consecuencias personales. ¿Crees que lo que no te mata te hace más fuerte? Según esta investigación, el proverbio es erróneo. “Lo que no te mata, te hace amar el riesgo”.
Economía: La Policía Metropolitana de Bangkok, Tailandia. Por ofrecerse a pagar más dinero en efectivo a los policías si estos rechazan aceptar sobornos.
Medicina: Hajime Kimata, Jaroslava Durdiaková, Peter Celec, Natália Kamodyová, Tatiana Sedláčková, Gabriela Repiská, Barbara Sviežená, y Gabriel Minárik. Por experimentos para estudiar los beneficios o consecuencias biomédicas de besarse intensamente (y otras actividades íntimas e interpersonales).
Matemáticas: Elisabeth Oberzaucher, de Austria, y Karl Grammer. Por intentar usar técnicas matemáticas para determinar cómo un hombre de Marruecos se las arreglo para engendrar 888 hijos entre 1697 y 1727.
Biología: Bruno Grossi, Omar Larach, Mauricio Canals, Rodrigo A. Vásquez, y José Iriarte-Díaz. Por observar que cuando pones un palo con un peso en la parte trasera de una gallina, entonces la gallina camina de una forma similar a aquella en la que pensamos que los dinosaurios caminaban.
Diagnóstico médico: Diallah Karim, Anthony Harnden, Nigel D’Souza, Andrew Huang, Abdel Kader Allouni, Helen Ashdown, Richard J. Stevens, y Simon Kreckler. Por determinar que una apendicitis aguda puede ser diagnosticada por la cantidad de dolor que sufre un paciente cuando va en un coche que pasa sobre bandas rugosas.
Fisiología y entomología: Justin Schmidt. Por crear el Índice Schmidt de Dolor de Picotazos, que evalúa el dolor relativo que sufren las personas al ser picadas por distintos insectos; y para Michael L. Smith, Por ofrecerse a que abejas le picaran en repetidas ocasiones en 25 lugares distintos de su cuerpo para ver en cuales duele menos (el cráneo, la punta del dedo medio del pie, y la parte superior del brazo) y en cuales duele más (las fosas nasales, el labio superior, y la base del pene).