Enterarse de protestas por parte de los taxistas en contra de servicios como Uber se ha convertido en una constante en los últimos meses, sin importar en qué ciudad se lleven a cabo. Ahora, llegó el turno de las protestas en contra de este servicio y de Cabify a la Ciudad de México.
Aproximadamente 300 taxistas protestan esta mañana en contra de Uber y Cabify en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) para denunciar la violación a los artículos 258 y 260 de la Ley de Movilidad del Distrito Federal, que comprenden lo siguiente:
Artículo 258
Comete el delito de transportación ilegal de pasajeros o de carga, el que sin contar con la concesión o permiso expedidos por la Secretaría para tales efectos, preste el servicio público, privado o mercantil de transporte de pasajeros o de carga en el Distrito Federal.
Artículo 260
Se sancionará con pena privativa de libertad de tres a seis años y multa de setecientos a mil días de salario mínimo, a quien dirija, organice, incite, induzca, compela o patrocine a otro u otros, a prestar el servicio público de transporte de pasajeros o de carga, sin contar con la concesión correspondiente.
Apegados a estos artículos de la Ley de Movilidad del DF, los taxistas, agremiados al colectivo Taxistas Organizados de la Ciudad de México, exigen ver avances en la investigación a partir de la denuncia interpuesta en diciembre de 2014 en contra de Rufino H. León, encargado de la Secretaría de Movilidad, por permitir la operación de estos servicios basados en una app para dispositivos móviles.
Los taxistas, que estacionaron sus unidades en las inmediaciones de la PGJDF, aseguran que a partir de la entrada en operación de Uber y Cabify han tenido pérdidas por más de 24 millones de pesos en conjunto.