La pregunta es si esto en realidad significa un clima más frío para nuestro planeta en el futuro cercano. En 1645 empezó el período llamado «Maunder mínimo», en donde desaparecieron prácticamente las manchas solares. Esta tendencia se mantuvo por unos 70 años y coincidió con la conocida «pequeña edad del hielo». cuando Europa y Norteamérica experimentaron temperaturas más bajas que el promedio. Sin embargo, esta teoría que indica que que la actividad solar es la que causa los cambios climáticos, es todavía controversiial y no hay evidencia convincente que pruebe esta correlación.
Helena Popova, de la Universidad Lomonosov de Moscú, ha predicho que si las teorías existentes sobre el impacto de la actividad solar en el clima son ciertas, entonces este mínimo significaría un enfriamiento evidente, similar al período Maunder. Ella desarrolló un modelo matemático-físico único de la evolución de la actividad magnética del Sol y lo usó para entender los patrones de ocurrencia de los mínimos globales en la actividad solar, dando así una interpretación física.
«Dado que nuestro mínimo en el futuro durará como 30 años, es decir 3 ciclos solares, es posible que el descenso de la temperatura no será tan profundo como en el mínimo Maunder», dijo Popova y añadió: «Pero tenemos que hacer un examen detallado. Estamos en contacto con los climatólogos de diferentes países. Estamos trabajando en esa dirección».
El ciclo solar es un cambio periódico en la actividad del Sol y en apariencia se miden estos cambios con respecto a las manchas solares. Estas tienen una duración de unos 11 años en promedio. El actual ciclo solar empezó en enero del 2008 con una actividad mínima al inicio del 2010. El Sol ahora tiene su mínimo de manchas desde los registros precisos que empezaron en 1750. esa declinación de la actividad solar de largo plazo ocurre después del gran pico máximo solar de 1956.
Pero de acuerdo con Collado Vega, el mínimo actual en el número de manchas solares no signifca que el Sol no nos va a mostrar su naturaleza violenta en los siguientes años. «hay un desarrollo de los agujeros de la corona, debidos a la reconfiguración del campo magnético solar». Los agujeros en la corona solar son regiones con menor densidad y temperaturas en la atmósfera exterior del astro, conocida como la corona. El Sol contiene campos magnéticos que van mucho más lejos de la corona misma y que son muy finos debido a los bajos niveles de energía y gas, los cuales hace que los agujeros de la corona aparezcan. Así, las partículas solares o el viento solar escapa y crea una densidad menor y temperaturas menores en esa área.
La flota existente de naves estudiando al Sol incluyen el Solar Dynamics Observatory (SDO), el Solar and Heliospheric Observatory (SOHO) y el Solar Terrestrial Relations Observatory (STEREO), son quienes nos dan constantes observaciones del astro rey y nos hacen entender más sobre la naturaleza de la corona del Sol. Y si esto fuese poco, la NASA tiene la sonda Solar Probe Plus, la cual está siendo desarrollada para revolucionar nuestro entendimiento del fenómeno solar. esta misión se lanzará para mediados del 2018 y volará cercana al Sol, mucho más cerca que otras naves. Su meta primaria es la de trazar el flujo de energía y entender el calentamiento de la corona solar, así como explorar los mecanismos físicos que aceleran el viento solar y las partículas energéticas. Esto ayudará definitivamente a poder predecir la actividad solar y ayudarnos a entender con más precisión el impacto de las características del Sol sobre nuestro planeta.
Referencias: