Aunque la plataforma existe desde 2004, muchos tal vez nunca han notado que en la página inicial de Facebook dice que el servicio es gratis y que siempre lo será. ¿Y por qué? Pues porque los usuarios son el producto de Facebook.
Cada vez que alguien abre una cuenta, Facebook se hace de mucha información personal del suscriptor. Con el tiempo esto se incrementa. Los usuarios empiezan a añadir a sus amigos (o hacen nuevos amigos), se suscriben a grupos que les interesan, intercambian opiniones e ideas en sus respectivos muros, etcétera.
De repente Facebook tiene un enorme acervo de datos de cada uno de los usuarios y he ahí su negocio: pueden entonces sugerirte que compres artículos relacionados con las actividades que más te gusten, por ejemplo, o ponerte anuncios que de alguna manera se ligan a tus intereses.
Para decirlo pronto: para Facebook eres un producto, el cual explotan gracias a la información que provees. Y muchas veces quizás no nos damos cuenta que esta red social pone datos sobre quién eres muchas veces de manera “inocente”, pero que revela información sensible en algunos casos.
Pongamos un ejemplo: si tú buscas a una persona en Facebook y la encuentras, puedes entrar a su muro, el cual presenta fotos de algunos de sus amigos con los que ha contactado. ¿Por qué Facebook pone esa información? ¿Por qué tienen que saber los que te buscan (por las razones que sean), quiénes son tus amigos virtuales? Eso suena a invasión a la privacidad.
Imaginen que conocen a alguien en la calle, en un evento, en el lugar que quieran. ¿Le preguntan quiénes son sus amigos? Lo dudo. Y si le preguntaran, ¿no sería una extraño viniendo de alguien que apenas estamos conociendo? Pues bien, Facebook muestra esa información en el muro de cada persona.
Y sí, la red social ofrece políticas de seguridad y protección de la privacidad, pero me es claro que no necesariamente son lo suficientemente adecuadas. Hay algunas medidas que cada usuario puede tomar para que sus datos los puedan ver ciertos amigos con ciertos atributos, pero de todas maneras esto parece insuficiente. Facebook deja escapar datos de cada usuario que no veo por qué permite que otros vean.
Puedo entender que una red de la complejidad de Facebook tal vez no puede controlar todos los detalles que se les puedan ocurrir a las personas, sobre lo que se puede o no mostrar, pero en mi opinión, cierta privacidad está siempre involucrada.
Pero voy a ir más lejos. ¿Alguien ha querido borrar su cuenta de Facebook? Es decir, no desactivarla temporalmente, sino borrarla totalmente. Pues les tengo noticias, aunque es un proceso relativamente simple, está escondido en la ayuda de la red social (busquen “borrar cuenta”). ¿Por qué? Porque para Facebook somos el producto, no quieren que nos vayamos tan fácilmente.
Compartimos fácilmente muchas cosas de nuestras vidas en Facebook y quizás no nos damos cuenta que estamos dando mucha información extra, que tal vez deberíamos guardarnos para nosotros. La privacidad es un tema y entiendo que mucha gente no lo considere importante, pero el hecho es que ahí está dada la información y ¿saben? parece que Internet no olvida.