Es importante mencionar que la piratería sí es una conducta lastimosa para el desarrollo de cualquier industria, ya que limita los incentivos a la creación de nuevos productos y servicios. Esto es, que la disminución de recursos para los creadores podría hacer que no inviertan su tiempo en seguir desarrollando su talento al no ser lo suficientemente redituable.
Sin embargo, muchas veces quien resulta más afectado con los avances tecnológicos es el intermediario que ya contaba con una cadena de producción armada y comienza a perder poder de negociación en cada uno de los eslabones. Y en el extremo, el creador puede terminar vendiendo al consumidor final sin necesidad de tantas personas en medio.
Aun así, el punto más relevante proviene de la censura a los contenidos en línea.
No es el primer intento, anteriormente con el ACTA (Acuerdo Internacional Anti-Falsificación) se buscaba transferir la labor de vigilancia a los proveedores de internet, los cuales debían monitorear el tráfico de sus usuarios y en caso de reincidencia, les debían cortar el servicio de internet.
Ahora, SOPA en Estados Unidos pretende imponer bloqueos a los distintos sitios de internet con contenido que pudiera lucir ilegal, de una forma discrecional ya que el solo hecho que tengas un link hacia un contenido de dudosa procedencia puede ser motivo suficiente para bloquear el sitio completo. Este concepto vago podría poner en peligro la libre navegación de los usuarios a sitios como YouTube, Twitter y Facebook, por poner algunos ejemplos.
Si tú como usuario subes un video de tu primo Juancho comiéndose una rebanada de pan en menos de un minuto (me comenta Monch que solo un par de personas lo han conseguido), y está una canción de fondo sonando, esta nueva propuesta podría hacer que bajen tu video por uso ilegal de la música y hasta censurar el sitio completo.
En la reunión celebrada la semana pasada, Google fue la única empresa que asistió a oponerse a esta regulación y se espera que este tema cobre mayor importancia cada día, con interesantes argumentos tanto a favor como en contra.
En América Latina nos topamos con un reto mayor: llevar el acceso a internet a todos los rincones de la región dado que existe una brecha digital considerable con los países desarrollados. Entonces yo enfocaría los esfuerzos gubernamentales en incrementar tanto la penetración de internet como la generación de contenidos en línea antes de empezar a restringirlos. ¿Y tú qué harías?