Desde hace algún tiempo, marcas como Audi, Nissan e incluso Google han perseguido el objetivo de crear un sistema confiable para que vehículos que se usan todos los días en las ciudades puedan conducirse a sí mismos. Audi dio un paso adelante al demostrar que un RS7 puede llegar a correr a altas velocidades sin que un piloto esté al volante.
La compañía alemana de autos lujosos tiene su propia tecnología en desarrollo y la ha demostrado previamente con vehículos que se estacionan solos o en comerciales con “peligrosos” niveles de contenido geek, pero su más reciente prueba hará latir los corazones de los amantes de las llantas y el asfalto.
En el extenso video se puede ver la prueba; para ir al momento del banderazo de salida, basta con adelantar al minuto 14:20.
El RS7 con motor de 560 caballos de fuerza corrió por el circuito Hockenheimring en la final del DTM, que es una competencia que se lleva a cabo en Alemania. Fue así como, a través de cámaras que reconocen la profundidad y un sistema GPS “corregido” para dar la mayor precisión en la pista se pudo lograr la hazaña que, en las rectas, llevó a este auto a correr a 240 km/h.
Por supuesto, aquí no hay derrapones – pues en primer lugar, no es “ese” tipo de prueba – ni tampoco impactos con otros autos pues se trató de un circuito cerrado y con un solo vehículo en la pista.
Lo interesante es comprobar lo seguro que puede resultar este concepto en ambientes controlados, los cuales, deberían ser replicados en caminos “abiertos” para que en un futuro se pueda garantizar que el piloto automático sea estable y confiable para transportar a sus ocupantes.
Es así como Audi cerró esta prueba con éxito y el resultado es lo que la propia empresa llamó “el vehículo autónomo más veloz en el planeta”.
Referencia: Audi