Virgin Galactic lleva la delantera en la carrera de las empresas aeroespaciales por volar civiles y su fundador, Richard Branson, tocó el límite con el espacio exterior antes que Jeff Bezos, que lo hará la próxima semana. Sin embargo, la compañía de este último, Blue Origin, irá un paso más lejos al realizar el primer vuelo suborbital tripulado sin piloto.
A bordo de New Shepard, Bezos y sus tres acompañantes, serán lanzados al borde del espacio el 20 julio. Esta nave de 18.3 metros de altura y capacidad para seis personas es reutilizable y autónoma, lo que quiere decir que no necesita un piloto.
Es por eso que la tripulación, que incluye al hermano del ex CEO de Amazon, Mark Bezos, la aviadora Wally Funk y un civil que compró su espacio en el histórico vuelo, no contempla astronautas experimentados o expertos técnicos. A pesar de ello, el grupo recibirá dos días de preparación.
Para Blue Origin es especialmente relevante demostrar con este vuelo que “ir al espacio suborbital es perfectamente seguro para la persona promedio”. Eso le permitirá impulsar lo que el banco suizo UBS estima que será un mercado turístico anual de 3,000 millones de dólares dentro de una década.