La historia de Monica Hall llegó a los medios por la pobre actuación que tuvo la empresa encargada de la venta. Cuando esta mujer hizo la configuración inicial del dispositivo, se topó con los dos inconvenientes antes mencionados debido a que el gadget estaba destinado a ser un modelo que docenas de personas podrían probar en la tienda.
Ante esto, Monica pasó horas al teléfono con Apple pidiendo ayuda. Después de que se llegó a la conclusión de que se trataba de un modelo demo, el encargado de atención a clientes que le atendió le asistió para dejar funcionando la tableta de forma normal.
Tres días después, cuando estaba usando una app de mensajería e intentó ingresar el número de su hija para enviar un texto, esta mujer se topó con que su agenda contenía más de 300 nombres de empleados en Apple, así como sus números de contacto.
Peor aún, al sincronizar la tableta con su cuenta de Apple, todos los contactos se transfirieron también a su iPhone, además, como el sistema de correo electrónico de su empresa no es compatible con iOS 7, Monica no pudo simplemente borrar toda la información de un solo golpe, es decir, para borrar los contactos se tenía que hacer uno por uno.
Finalmente, Hall contactó a AT&T sin encontrar ayuda en un primer intento, mientras que Apple dijo que el error y la culpa de todo esto fue de la empresa telefónica por haber entregado un modelo demo en lugar de uno nuevo. La empresa en cuestión terminó ofreciendo a Monica 100 dólares por las molestias ocasionadas.
Definitivamente la conclusión de esta historia no fue grata, pues esta mujer debió recibir una tableta nueva – por la que pagó su precio completo – en lugar de una bonificación parcial.
Esta es una historia aislada, sin embargo, podría pasar a cualquiera en diferentes partes del mundo, por lo que recomendamos verificar el estado de un producto apenas sea adquirido, buscar que no haya marcas de uso en él y, de hallar cualquier irregularidad, exigir el remplazo inmediato del dispositivo.
Referencia: Cnet