Ciertas industrias tiene una predominancia masculina, siendo la ciberseguridad una de ellas, sector en el cual las mujeres figuran poco.
En el mundo entero la participación femenina es muy baja en comparación con los varones, lo cual queda mostrado en un estudio de Cybersecurity Ventures.
De acuerdo con la compañía, a nivel global la mujeres solo representaron el 25% del talento humano en ciberseguridad en 2021.
Pero este no es el único dato que podría ser preocupante. También la falta de fuerza laboral en general.
Información de Microsoft reveló que, actualmente existen 2.5 millones de plazas por cubrir en este rubro, lo cual da cuenta de la falta de expertos.
Ciberseguridad y la falta de mujeres
Pese a una mayor integración de las mujeres en las ciencias, ingenierías y tecnología, sigue habiendo una brecha importante.
En el caso de la ciberseguridad no es la excepción. Microsoft realizó una encuesta en la cual deja clara esta situación.
Un 83% de los consultados dijeron que sí creen que haya una oportunidad para las mujeres en dicho sector.
No obstante, menos de la mitad del sector femenino encuestado (44%) mencionó que siente que están representadas lo suficiente en la ciberseguridad.
También un 54% de ellas dijo que existe un sesgo de género en la industria, el cual deriva en salarios y otros apoyos desiguales.
La misma encuesta también mostró que le gente tiene la idea de que los hombres son más propensos a este sector que las mujeres, además de estar más calificados.
Sumado a esto, 27% de las mujeres consultadas dijo que los hombres son vistos como una opción más conveniente para los trabajos tecnológicos.
Si bien estos datos son reveladores y preocupantes al mismo tiempo, hay un aspecto que resulta más complicado y digno de atender.
La consulta de Microsoft también informó que una de cada cuatro personas encuestadas consideran que es más probable que los padres guíen a sus hijos hacia un área tecnológica y de ciberseguridad que a sus hijas.
Y por último, pero no menos importante, es que al no tener suficientes ejemplos o referentes femeninos, las mujeres no sienten gran interés por dicha profesión.