Un 14 de marzo de 1994 se lanzó Linux 1.0, y ahora se cumplen 25 años de dicho lanzamiento. Fue esta la versión que poco a poco, con paso lento pero firme, se inició uno de los esfuerzos de software colaborativo más importantes en toda la historia de la computación.
Su autor, Linus Torvalds (28 de diciembre de 1969, Helsinki, Finlandia) es hoy día un ingeniero de software finlandés-estadounidense, conocido por iniciar y mantener el desarrollo del kérnel, es decir, el núcleo de Linux, el cual está basado en el sistema operativo libre Minix creado por Andrew S. Tanenbaum y en algunas herramientas, varias utilidades y los compiladores desarrollados por el proyecto GNU. Actualmente Torvalds es responsable de la coordinación del proyecto.
Este 14 de marzo de 2019, se cumplen 25 años desde el lanzamiento de Linux 1.0, el cual es de código abierto y libre, por lo cual cualquiera lo pude estudiar y modificar si así lo considera necesario. Desde luego que un sistema de esta naturaleza tiene una complejidad importante y las modificaciones no son -digamos- triviales, pero en cualquier caso, ha mostrado un camino alternativo al código propietario.
Linux viene en diferentes distribuciones: Fedora, Ubuntu, CentOS, Mandrake, Debian, etcétera, las cuales están diseñadas para que el usuario saque ventaja de algunas características o bien, que sea más fácil de usar en ciertos aspectos. Además, Linux ha generado que programadores de todo el mundo incluyan este sistema operativo incluso en procesadores ARM, como en el caso de la Raspberry Pi, una computadora del tamaño de una tarjeta de crédito, de bajo costo, que usa Raspbian, una versión de Debian pero para procesadores ARM.
Linux se usa en sistemas embebidos con mucho éxito, aunque también está presente en más del 69% de los servidores Apache que hay instalados en el mundo. Su versatilidad, su capacidad para ser modificado y el trabajo de muchísimos desarrolladores que han colaborado para mejorar en casi tres lustros el sistema, hablan de la solidez del mismo.
Si usted no ha probado Linux todavía, hoy se tienen muchas opciones. Desde instalarlo directamente en una computadora como el poder correrlo desde un CD o bien desde un USB, de manera que no necesariamente hay que desprenderse del sistema operativo de su máquina de escritorio (digamos Windows o Mac OSX), sino que puede usarse sin necesidad de modificar las cosas para que lo que antes usaba se vuelva inutilizable.
Algunas distribuciones como Ubuntu, RedHat, Debian o Linux Mint, por ejemplo, están disponibles a través de su navegador para que descargue, baje y pruebe la última versión. Si cree que el software libre no es lo suficientemente sólido o bueno porque no cuesta dinero, quizás se lleve una muy agradable sorpresa.