Un fenómeno que azota literalmente a los usuarios de internet son estas barras de herramientas que se instalan, a veces sin que sepamos cómo, en los navegadores que usamos. En principio se busca que los usuarios puedan utilizar las opciones que tienen estos programas para entrar a lugares donde hay juegos en línea, usar diferentes motores de búsqueda, poner los sitios favoritos accesibles a todo momento, etcétera. Y, sin duda, podrían ser útiles. El problema es que se cuelan y sin permiso se instalan, cambiando la página de entrada del navegador por una página en particular, por ejemplo. Y eso es inadmisible y grosero. ¿Quién les ha dicho a nadie que queremos una barra de herramientas en nuestro navegador?
Yahoo!, al instalar el Messenger, pone un aviso (que puede rechazarse), indicando que instalará la Yahoo Toolbar, porque en esa empresa han decidido que su programa puede ser muy útil a los usuarios. Las hay también de empresas de seguridad, para así arrancar desde el navegador el antivirus. Otras son de anuncios y promociones de compañías de las que nunca hemos sabido ni quienes son.
La pregunta invariable es “¿cómo llegó y se instaló?” la respuesta es siempre la misma: “no lo sé”.
Uno podría sospechar que en algunos sitios web se descargan estas barras y se colocan en los navegadores sin permiso de los usuarios (y no dudo que las haya). Otras les damos permiso los usuarios, muchas veces sin darnos cuenta. Esto suele pasar cuando descargamos software y lo instalamos. Muchas veces queremos acabar con este asunto lo más rápido posible y pasamos prácticamente sin ver las pantallas de la instalación, porque nos parecen similares al anuncio de rutinas de las azafatas en los aviones comerciales, que nadie hace caso de ellos.
Por ejemplo, me di cuenta que al instalar una versión de Java, aparece la toolbar del buscador Ask, la cual podemos deshabilitar, pero que sospechosamente viene habilitada la instalación de la misma. ¿A quién se le habrá ocurrido incorporar esta toolbar en la instalación de Java? Misterio.
Para mí las mentadas barras de herramienta tienen dos problemas: uno, pueden disminuir la velocidad del navegador, y dos, me parece muy grosero que se usen esos trucos para instalar software que realmente ni queremos ni necesitamos. Añadido a esto, tal vez algunas barras de herramientas sean spyware (no me consta, pero, ¿qué necesidad hay de arriesgarse?).
La moraleja de la historia es simple: antes de instalar algún nuevo software, vea con atención la información que se le presenta en la pantalla. Si lo hace, pasará menos dificultades y quizás no tenga que buscar en la red más adelante cómo deshacerse de la infame barra de herramientas que se instaló en su navegador, sin aparente permiso de usted.
Referencias: PC World