Según The Information, las gafas o lentes de realidad virtual y aumentada en las que Apple lleva trabajando bastante tiempo estarán listas en 2022, aunque el medio indica que podrían retrasarse hasta 2023. Sin embargo, lo que llamó la atención del nuevo reporte del medio norteamericano es que ofrecieron detalles de su funcionamiento, advirtiendo que las gafas no serán totalmente independientes.
La fuente dice que los lentes AR/VR necesitarán de un iPhone u otro dispositivo para funcionar. Esto no significa que será como los Samsung Gear VR que necesitan que introduzcas el teléfono dentro del visor para poder usar las funciones de VR, sino que será necesaria una conexión inalámbrica entre el iPhone y los lentes para poder ejecutar distintas tareas.
Básicamente las gafas serán como un Apple Watch (versión sin LTE), que requiere sí o sí estar conectado al iPhone para poder sacarle provecho.
¿Por qué será necesario usar un iPhone o iPad?
The Information dice que la razón de esta decisión en el funcionamiento se debe a que el procesador de las gafas no será tan poderoso como el A14 Bionic de los iPhone, o el M1 que vemos en el iPad Pro y algunas Mac.
El teléfono, tablet o computadora serán los encargados de procesar las imágenes que se requieren para realidad virtual y aumentada, pues aparentemente el chip que llevarán los lentes de Apple carecen de las capacidades de Neural Engine que Apple monta en sus mejores procesadores.
Asimismo, se insiste en que las pantallas que llevarán estos lentes tendrán resolución 8K, y que también montarán cámaras de alta resolución para tener una experiencia mucho más inmersiva.
Aunque las gafas podrían llegar entre 2022 y 2023, Bloomberg dice que Tim Cook quiere estar al frente de Apple cuando la compañía lance su siguiente gran producto. Este dispositivo podrían ser las Apple Glass, pues en distintas ocasiones el CEP de Apple ha revelado la importancia de la realidad aumentada y virtual dentro de los planes a corto plazo para la compañía.
Respecto al precio, los rumores indican que su costo inicial sería de 3,000 dólares, unos 60,000 pesos mexicanos aproximadamente.