En el mundo de la programación, particularmente cuando se trata de ambientes de desarrollo, hay una opción que no hay que pasar por alto, el de las máquinas virtuales (virtual machines – VM), que permiten de alguna manera emular lo que ocurre en la máquina real sin tener muchas veces el hardware adecuado para probar. Este es el caso de Android, que tiene ya una VM, la cual se ha actualizado a JellyBean, es decir, la versión 4.1 de Android.
Quienes desarrollan en Android saben que en muchas ocasiones hay que batallar con el emulador estándar que se incluye en el SDK, pero de hecho, son ganas de pasarla mal, porque hay un emulador completo de Android para la máquina virtual de VirtualBox. Es rápido y da una experiencia razonable al usuario Además, pueden sacarse “fotografías” de la pantalla para diferentes propósitos: documentación, ejemplos, etcétera.
La versión más reciente hace posible que las actualizaciones sean más sencillas, separando los discos virtuales en uno para el sistema y otro para los datos. Aquí tenemos tres posibles versiones: tablet, teléfono y tablet con capacidades telefónicas. Hay una app separada de Google que puede bajarse de la tienda virtual. Cabe decir que hablamos de la versión x86 de Android por lo que muchas apps nativas en ARM no correrán, a menos que se tome el tiempo de instalar el emulador Houdin (el cual también viene incluido). Para la mayoría de las apps de Android esto no es un problema porque son simplemente bytecode (el código que genera Java de su propia máquina virtual), por lo que no se fija si la app es nativa de un procesador u otro.
Para hacer el trabajo, todo lo que hay que hacer es descargar el archivo OVA correspondiente, instalar VirtualBox y entonces importar el archivo OVA como una nueva máquina virtual. Un par minutos después podrá correr la máquina virtual. Suele ser buena idea incrementar la resolución de la pantalla y dejar la barra de programas presente, porque hay que recordar que sólo se tiene ratón y no una pantalla multitáctil.
Referencias: