La Inteligencia Artificial ha logrado ser de suma importancia para la sociedad, porque permite conocer cientos de situaciones a tiempo y ayudar a controlarlas, sean enfermedades, desastres naturales y ahora estados de ánimo.
El propósito con el que se ha creado esta función, es conocer si las personas presentan los signos de la depresión para poder brindarles apoyo y que no caigan completamente en la enfermedad.
Para poder realizar esto, los investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) crearon un modelo de red neuronal que podrá analizar los audios o textos que lleve a cabo una persona en una entrevista con preguntas específicas.
De acuerdo a ello, la IA buscará los patrones de los rasgos típicos de este malestar y detectará si la persona en cuestión está comenzando o teniendo depresión, esto gracias al entrenamiento de secuencias de datos que se le dio con pacientes que estaban en los dos polos: deprimidas y mentalmente sanas.
Esto, sumado a los algoritmos informáticos, sirvió que se supiera cuáles son algunas de las frases determinadas que expresan las personas de los dos sectores y hacer una predicción concreta.
La idea a largo plazo consiste en que esta herramienta pueda ser utilizada en los hospitales y consultorios médicos, para que los especialistas no equivoquen su diagnóstico y sepan cuál es el método indicado para las personas que se presenten.
En el documento del MIT, se detalla cómo funciona dicha red y la manera en que se desmenuzan las respuestas que los individuos dan en la plática, la cual también está grabada para que se escuche el tono y la intención de las palabras.
Esta información también plantea que al conocer los índices de depresión en la época actual, las personas podrían tener una app en sus celulares que sirva justamente como la IA, que permitiría analizar las conversaciones y conversaciones que tienen las personas comúnmente.
Aún falta por sacar a relucir las ventajas y desventajas que la aplicación tendría, porque su funcionamiento se inmiscuiría en la vida privada de los usuarios, por lo que primeramente se quiere implementar en las instituciones de salud y con base a ello, ver cómo sería su futuro.