Ken Hovanes es el propietario del teléfono en cuestión, y accidentalmente dejó caer su teléfono inteligente dentro del lago Smith Lake en Alabama hace unos seis meses, según narró al sitio 9to5Mac. Dado que él lo perdió de sus manos en un área que tenía aproximadamente dos metros de profundidad, perdió todo contacto visual con él y lo dio por “muerto”.
Hovanes decidió seguir adelante, y firme creyente de su convicción, compró otro iPhone. ¿Cuál habrá sido su sorpresa meses después cuando el nivel del lago había bajado y la claridad del agua permitió que este afortunado usuario encontrara su móvil perdido?
Más allá de ello, Hovanes se percató que el teléfono seguía funcionando aún después de que seis meses se agua sucia lo mantuvieran en standby permanente. Obviamente, el dispositivo es apenas un rastro de lo que fue tiempo atrás, pero por lo que se ve en las fotografías, el propietario tiene aún la posibilidad de rescatar los datos que tuviera almacenados en la memoria interna.
De hecho, Ken ha dicho que está tratando de limpiar el conector del teléfono para poder descargar las fotografías guardadas en el iPhone. Como se puede apreciar, el agua dañó la pantalla, separó un poco el cuerpo del display y, en general, lo dejó como para pieza de museo, una con un look antiguo y oxidado.Quizá Ken debió aprenderá usar iCloud para evitar que sus datos se quedaran perdidos bajo el agua, ¿no lo creen? ¿Ustedes tienen alguna experiencia similar con algún dispositivo? Quizá no han sido seis meses bajo un lago, pero estamos seguros que muchos de nuestros lectores tendrán anécdotas qué compartir con nosotros.
Referencia: 9to5Mac, GSM Arena Blog