Como es bien sabido, la tableta de esta compañía tiene el gran atractivo de tener un costo de 199 dólares, a pesar de que el precio de producción por cada unidad sea de 250 dólares.
Para minimizar los problemas que encontraron la última vez, Amazon podría tomar a Foxconn como un fabricante externo y así evitará el tener que probar los componentes de la tableta por sí mismo.
Amazon claramente ha aprendido de sus experiencias con el primer Fire, empezando por el apresurado lanzamiento a los anaqueles que tuvo ese modelo hace unos meses.
Con Amazon invirtiendo más tiempo en la creación del siguiente Kindle Fire, estamos esperando algo especial por venir. Hay quienes hablan de una variante de 7″ y 9″ e incluso un procesador quad-core a bordo, pero no ha habido alguna versión oficial de la compañía al respecto.
Sin embargo, a pesar de todo el poder de hardware que pudiera colocar Amazon en su siguiente versión de tableta, la empresa debería apegarse al principal factor que hizo del primer modelo un éxito: el precio reducido.
De no ser así, estaríamos hablando de una tableta más llegando a un mercado ya saturado por ofertas similares de diversas empresas. Veremos cuál es la estrategia que sigue Amazon para intentar volver a impactar la electrónica de consumo.
Fuente: Unwired Review