Jeff Bezos y sus tres compañeros de tripulación volaron por encima del desierto de Texas, en Estados Unidos, a bordo de la nave autónoma New Shepard de Blue Origin esta mañana, completando con éxito su misión suborbital y regresando a tierra a salvo.
El transporte sin piloto encendió sus motores BE-3 para despegar desde las instalaciones del sitio del Launch Site One de la empresa aeroespacial, alcanzando unos 107 km sobre la superficie de nuestro planeta.
El viaje duró unos 10 minutos y medio y permitió a la tripulación civil llegar más allá de la llamada línea Kármán, establecida a 100 km de altura. Posteriormente, la cápsula del New Shepard regresó al suelo en un aterrizaje suave impulsado por un sistema de paracaídas.
“El mejor día de todos” y “eso fue increíble” fueron algunas de las primeras palabras de la tripulación al término de la misión.
Por la ventana, se pudo ver a Bezos hacer una señal de aprobación después de aterrizar y antes de salir de la misma. Al bajar, chocó las manos y abrazó al equipo de Blue Origin.
Bezos, su hermano Mark Bezos, la piloto Wally Funk y el joven recién graduado Oliver Daemen, son ahora las primeras personas en haber participado en un vuelo civil de este tipo sin piloto.