La tecnología MagSafe, que conocimos años atrás gracias a las Macbooks —y que al parecer regresará a la línea Pro— supone un avance en los nuevos iPhone, pues, además de ayudar a acoplar accesorios, sus imanes permiten una carga inalámbrica más eficiente; sin embargo, para otras personas podría resultar perjudicial para la salud.
De acuerdo con un artículo de Heart Rhythm Society, los imanes que se encuentran en los iPhone 12 podrían llegar a interferir con ciertos implantes médicos, como marcapasos y desfibriladores.
Semanas después de la publicación del artículo, Apple actualizó una entrada en su sitio relativa a los imanes incluidos en sus más nuevos smartphones, en donde afirma que “no se espera que [los iPhone 12] representen un mayor riesgo de interferencia magnética en los dispositivos médicos que los modelos de iPhone anteriores”.
No obstante, recomienda que para evitar interacciones con marcapasos y desfibriladores implantables, los cuales pueden incluir sensores que responden a imanes, lo mejor es mantener los iPhone y respectivos accesorios MagSafe a una distancia segura de los implantes médicos: “más de 15 cm/6 pulgadas de distancia o más de 30 cm/12 pulgadas de distancia si se carga de forma inalámbrica”.
La compañía de la manzana recomienda a los usuarios que cuenten con algún implante médico recurrir a los fabricantes para saber si existe algún riesgo, y consultar también a su médico de cabecera.