Así es, pero esto no sucederá en el diseño o funcionamiento general del software, sino en la forma como Microsoft suministra actualizaciones al navegador pues, a partir del 12 de enero de 2016, las versiones anteriores a Internet Explorer 11 ya no recibirán soporte de parte de la empresa.

Google lanza constantes mejoras para Chrome y el navegador se actualiza automáticamente a la versión más reciente, con lo que se asegura que la mayoría de los usuarios estén usando una edición estable que incluya los cambios más nuevos. Internet Explorer no funciona así.

A lo largo de los años, las versiones antiguas de Internet Explorer se han quedado corriendo en las PCs de muchas personas en todo el mundo; esto significa que Microsoft debe seguir dando soporte a ediciones como Internet Explorer 8 ó 10, y que los desarrolladores de páginas y contenido web tienen que asegurarse que sus sitios sean compatibles con cada versión del explorador.

Afortunadamente Microsoft decidió que para la fecha mencionada se tendrá que haber migrado a la versión 11, o en caso de que para esa fecha ya esté lista  la edición 12 o posterior, se tendrá que haber instalado esa actualización para seguir recibiendo soporte de parte de la compañía.

Esto es una buena noticia para la comunidad entera de usuarios de Internet Explorer, sobre todo para los desarrolladores que sólo se tendrán que preocupar por crear una versión de su contenido, compatible con la edición más reciente del software de Microsoft.

Quizá los únicos “afectados” serán las empresas y quienes administran el servicio de IT, pues realizar la actualización a grandes redes de hardware podrá ser complejo; no obstante, una vez hecho el cambio se podrá aprovechar funciones como el Enterprise Mode de Internet Explorer 11 para garantizar que el contenido web que sólo corre en versiones anteriores de IE siga siendo accesible.

Así que, si utilizas Internet Explorer será mejor que te asegures de estar corriendo la edición más nueva disponible.

Referencia: Blog de Internet Explorer