Una nueva campaña de Indiegogo (crowdfunding) para crear un alimentador de gatos que puede monitorear la salud del animal midiendo su apetito y su cambio de peso ya ha logrado su meta, lo cual demuestra las nuevas posibilidades de la inteligencia artificial en el ámbito casero y cotidiano.
No hace mucho una red neuronal hizo historia aprendiendo, a su manera, a reconocer un gato después de ver muchos videos de youtube. El reconocimiento facial se ha convertido en algo tan sencillo que ya se encuentra en muchísimos dispositivos, desde los teléfonos (sus cámaras), hasta los robots de bajo costo que hacen estwe reconocimiento de manera rutiniaria. Pero hasta ahora, no se había encontrado una aplicación práctica a tratar de reconocer los rostros de gatos en particular.
Una experiencia personal de alguien que casi pierde a su gato, el cual había dejado de comer y beber debido a una enfermedad, inspiró la invención de Bistro, un dispensador de comida de gatos que monitorea la historia de la dieta del gato y manda la información al teléfono celular del dueño. El sistema puede monitorear muchos gatos gracias al reconocimiento facial de ellos.
El alimentador, de la compañía taiwanesa 42ARK, fundada por Mu-Chi Sung, incorpora sensores de carga por lo que las porciones de comida y agua del dispensador pueden ser monitoreadas. Usando la app Bistro, se puede llevar cuenta de la historia de alimentación del gato por día, semana o mes y así obtener un reporte de salud. El sistema puede mandar notificaciones inmediatas sobre el cambio de la sallud de la mascota si nota que ciertos patrones cotidianos dejan de cumplirse.
La cámara tiene un rol dual. Por una parte permite ver en tiempo real cómo se alimenta el minino en el dispensador del alimento, y para los amantes de los gatos con más de uno, usa reconocimiento facial para saber qué gato es el que está alimentándose, pudiendo monitorear varias mascotas en la casa.
La empresa taiwanesa ha decidido incluso ir más allá abriendo el API del dispensador de manera que los programadores y hackers, amantes de los gatos, puedan programar sus propias estrategias de alimentación. Estos programas quedarían en principio disponibles para toda la comunidad que tuviese este dispositivo. Otro aspecto de Bistro es que se puede uno suscribir a otros amantes de estas mascotas y compartir videos de sus gatos en la comunidad en línea, y dar además información sobre la salud y dieta de estos animales.
La campaña para hacerse de fondos empezó el 15 de julio y termina hasta el 14 de agosto. Sin embargo, ya han excedido los 100 mil dólares que pedían para trabajar en el prototipo y entrar a producción. De hecho, ya la empresa piensa en las mejoras, por ejemplo, una conexión directa a Internet, un respaldo de batería por si se va la corriente eléctrica y el añadir un micrófono y bocinas para que incluso se pueda hablar con el gato cuando uno no esté en casa o este de viaje.
Se espera que el costo final (al público) de este dispositivo sea de unos 249 dólares.
Referencias: