Una de las empresas que tuvo que frenar de tajo su relación comercial con Huawei fue Intel, compañía que suministra muchos de los procesadores que utiliza la compañía para computadoras y servidores en todo el mundo. 

Sin embargo, desde los primeros días en los que Donald Trump impuso el veto comercial a Huawei, Intel ha intentado convencer al gobierno de los Estados Unidos de las graves consecuencias de dicha decisión, razón por la que ha encontrado un “hueco legal” que le ha permitido reactivar su relación comercial con Huawei. 

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Según el New York Times, fuentes de Huawei e Intel han confirmado al medio norteamericano que ambas compañías están haciendo negocios juntas, todo ello sin comprometer el cumplimiento de la ley por parte de Intel. 

Componentes estadounidenses que no son estadounidenses 

Según la fuente, para lograr esto Intel se ha aprovechado del etiquetado y el origen de sus componentes, y es que la marca ha declarado que los componentes producidos fuera de EEUU por empresas norteamericanas no siempre se consideran de fabricación estadounidense. 

Es justamente esta producción la que Intel está comercializando de nuevo con Huawei, y la que aseguran en todo momento que no está violando las condiciones del veto comercial de Donald Trump. 

Por su parte, John Neuffer, presidente de SIA (Semiconductor Industry Association) ha mencionado al New York Times que se ha discutido con el gobierno de los Estados Unidos que algunos artículos pueden suministrarse a Huawei de manera consistente con la Entity List y las regulaciones aplicables, y que empresas como  Intel o Micron son las que están trabajando de nuevo con la empresa china. 

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Sin embargo, la SIA deja esta decisión de forma libre a cada compañía, argumentado que cada una tiene necesidades distintas, y que el veto comercial les puede afectar de distintas maneras, pues a algunas empresas les ha generado más pérdidas que a otras, situación que podrían reducir con esta práctica.