En un acto sin precendentes, la Comisión Europea ha multado a Intel con la enorme cantidad de $1,450 millones de dólares (1,060 millones de euros) después de una intesa investigación acerca de reclamos de prácticas monopólicas y bloqueo del libre acceso a negocios la cual duró 8 años.
Algunos analistas opinan que esta multa ayudará a AMD a recuperar parte del mercado perdido pero no esperan que afecte de manera sustancial las operaciones de Intel. Así mismo se cree que esta multa pondrá a trabajar a los reguladores de Estados Unidos al igual que a sus contrapartes de Japón y Corea del Sur los cuales ya están iniciando sus investigaciones.
La acusación se basa en reclamos de que Intel pagó a fabricantes de computadoras para atrasar o suspender sus planes de lanzamiento de productos que usaban los chips de AMD, pagó a comerciantes para que sólo vendieran productos con chips Intel y de bajar sus precios -ilegalmente- para animarlos a que sólo compraran sus productos y no los de AMD.
Esta multa es la más alta que le ha sido impuesta a una empresa por parte de la Comisión Ejecutiva de la Unión Europea; superando los 896 millones de euros con los que fue multado el fabricante de cristal Saint-Gobain por fijar precios y la famosa multa de 497 millones de euro que tuvo que pagar Microsoft por abuso de dominio.
La sentencia obliga a Intel a detener sus prácticas ilegales inmediatamente, aunque según voceros del propio Intel, no están seguros de qué es lo que debe de cambiar la empresa para cumplir con los lineamientos impuestos.
Algunos suponen empresas como Dell, serán de las más afectadas por el fallo ya que ha favorecido mayoritariamente a Intel en la venta de sus productos, caso contrario de su competidor HP.