La erupción del Volcán de Fuego en Guatemala sigue sacudiendo al mundo. El brutal fenómeno natural ya superó las 100 muertos y los 200 desaparecidos, y todo indica que la cuenta puede aumentar. Uno de los aspectos más brutales de la tragedia es el cambio que un evento como este provoca en la faz de la tierra debido a la expulsión masiva de ceniza y material incandescente.
Para dimensionar la magnitud del impacto, agencias noticiosas han puesto a circular un paquete de imágenes satelitales que muestran el antes y después de algunas de las zonas afectadas y la diferencias es abrumadora. Campos de golf, spas, poblaciones, bosques han quedado sepultados bajo gruesas capaz de ceniza y magma frío, junto con todas las implicaciones ecológicas que eso tiene al tratarse de material tóxico.
Se estima que el número de damnificados por el desastre rebasa 1.7 millones de personas, de acuerdo con el Instituto Nacional de Ciencias Forenses, Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de Guatemala.