Los fenómenos naturales, son algo que el ser humano no puede controlar porque la fuerza de la naturaleza es imparable, sin embargo, hay algo que sí se puede realizar para poder frenar las consecuencias que ésta provoca, o al menos eso quieren intentar Google y Harvard.
Ambas instituciones conocen los terribles resultados que dejan las catástrofes como tsunamis, erupciones de volcanes y terremotos, así que para evitar que los daños sean tan perjudiciales, los científicos de Harvard y Google han estado trabajando de manera conjunta para ver cómo la Inteligencia Artificial podría ayudar.
La idea principal se centra en los terremotos y en la manera de poder predecir con exactitud cuándo y dónde se dará una réplica, ya que de esta manera se podrá prevenir a la población de dicho sector.
Con base en ello, se mejoró el modelo que tenían previamente: el Estrés de Coulomb, el cual analiza las reacciones de diferentes materiales en un evento sísmico, gracias a la red neuronal que detecta patrones, la cual entrenaron con más de 130,000 sismos y réplicas.
De esta manera y con las mejoras implementadas, se mejoraron los porcentajes de exactitud, ya que en una escala de 0 a 1, donde 0 es nada y 1 es la precisión total, se consiguió que el nuevo sistema de IA tuviera un 0.849 ante el 0.583 que había antes.
Esto se debe a que la Inteligencia Artificial puede tomar en cuenta diferentes variables al mismo tiempo, contrario a lo que realiza un grupo de personas, por lo que se pueden considerar más datos en menos tiempo, lo que se traduce en resultados eficaces que pueden ayudar a predecir las réplicas con mayor exactitud.
Sin embargo, esta herramienta aún está en fase de pruebas, por lo que no se puede lanzar ni implementar de manera oficial, así que sólo queda esperar a que se arreglen ciertos detalles, para que la sociedad y el mundo en general pueda tomar las precauciones necesarias cada vez que se viva un terremoto.