Hace unas horas, Google inició la venta del teléfono Nexus 4 y la tableta Nexus 10 en las Play Store de Reino Unido y Australia; no pasó mucho tiempo para que el stock que se tenía previsto de ambos dispositivos se agotara. Algo similar pasó cuando estos aparatos aparecieron en la tienda en línea de Google para los Estados Unidos, aunque varios problemas han estado surgiendo con el sistema en el sitio.
Google presentó sus Nexus 4 y Nexus 10 días atrás, a pesar de que el evento para tal fin fuera cancelado por la llegada del fenómeno meteorológico Sandy a la costa de la ciudad de Nueva York.
El teléfono inteligente tiene una pantalla de 4.7” 1280×768, procesador quad core a 1.5GHz, 2GB de RAM, cámara de 8 megapíxeles y NFC, mientras que la tableta cuenta con una pantalla de 10” y altísima resolución 2560×1600, procesador dual core, cámara de 5 megapíxeles y 2 GB de RAM. Ambos tienen la versión 4.2 de Android.
Como lo mencionamos, cuando estos productos aparecieron en la Play Store de los Estados Unidos, se comenzaron a experimentar problemas con el sitio para poderlos adquirir. Por ahora se han podido realizar algunas compras, y en tan sólo 25 minutos, como se ha señalado en otros sitios, se agotaron las existencias del teléfono insignia.
La razón para que exista tal demanda de estos gadgets, además del poderoso hardware que ostentan, es su precio tan bajo. El teléfono Nexus 4 cuesta 299 dólares para la versión de 8GB, o 349 para la de 16GB; a diferencia de lo que uno pensaría, ese precio es sin contrato.
Nexus 10 tiene un precio de 399 dólares para la versión de 16GB, o 499 dólares para la de 32GB. Una de las principales desventajas de ambos aparatos es que no cuentan con una ranura de expansión, así que el usuario depende totalmente del almacenamiento interno y de algún servicio en la nube, como Google Drive, en el que la empresa de Mountain View tiene depositada toda su confianza.
Entre tanto movimiento, a nosotros nos gustaría ver que la tienda de Google ampliara su disponibilidad de servicios a regiones como México, donde no podemos tener acceso más que a las aplicaciones para Android, y no al demás contenido digital o hardware que la marca distribuye con tanto éxito en diversas partes del mundo.