La Inteligencia Artificial será, sin duda, uno de los temas que en los próximos años será muy popular. Hay además una serie de implicaciones éticas sobre el uso de inteligencia artificial en los diferentes dispositivos. Por ello, OpenAI es una nueva iniciativa sin fines de lucro que busca poner el control de este tipo de tecnologías en las manos de las personas. Es interesante que Elon Musk, Reid Hoffman, Peter Thiel y Amazon Web Services están poniendo los fondos, que alcanzan la cifra de mil millones de dólares. De hecho, ya Elon Musk ha hablado de los peligros potenciales de hacer mal uso de la IA. Este paso pues suena razonable en muchos sentidos. Cabe decir que Google, Microsoft y Facebook, que son tres jugadores del mundo de la IA comercial no están en el OpenAI.
La lista completa de fundadores son: Sam Altman, Greg Brockman, Elon Musk, Reid Hoffman, Jessica Livingston, Peter Thiel, Amazon Web Services (AWS), Infosys y YC Research. Se han comprometido a apoyar la causa con mil millones de dólares para que el esfuerzo sea más que para uso de una contingencia. OpenAI ha indicado que espera solamente gastar una fracción pequeña de esta cantidad en los siguientes par de años.
El director de OpenAI es Ilya Sutskever, quien es conocido por sus desarrollos en redes neuronales. Como estudiante de investigación de Geoffrey Hinton, Sutskever fue uno de los expertos que Google adquirió cuando compró DNNresearch Inc., una empresa especializada en aprendizaje profundo de computadoras (deep learning). Después de tres años con el equipo de Google, el ahora director de Open AI ha puesto su propia empresa de investigación.
No está muy claro qué es lo que se hará en OpenAI. “Nuestra meta es avanzar en la inteligencia digital de la forma que beneficie más a los humanos como un todo, sin tener que estar limitados a tener que obtener una compensación financiera por ello”, indica la organización. Y es evidente que el punto de la ética tendrá que ser tocado en algún momento: “Es difícil saber qué tanto de IA puede beneficiar a la humanidad, e igualmente difícil es imaginar qué tanto podría dañar a la sociedad si la construimos incorrectamente”. Aparentemente la idea es la de permitir a los investigadores que hagan el trabajo sin tener que guardarse sus ideas en las empresas donde trabajan o protegidas por patentes: “Los investigadores se les pedirá encarecidamente que publiquen sus trabajos, ya sea en artículos, blogs o código y nuestras patentes (si es que hay alguna), serán compartidas con el mundo”.
Y aunque todo esto suena muy bien, parecen haber llegado un poco tarde. Ya Google tiene patentados algunos aspectos fundamentales de los enfoques modernos de la IA y no han dicho qué planes tienen para con ellos. Si se quiere que OpenAI tenga éxito, es claro que habrá que incorporar a Google o a Microsoft, sino es que a ambos. Facebook por su parte no parece siquiera interesarse por la iniciativa.
OpenAI ha empezado a contratar gente, ya sea como estudiantes (internos) y para los profesionales. Por el momento la sede es San Francisco, California pero incluso en esa zona no hay muchos expertos en el tema. Sin embargo, la iniciativa está ahí. Habrá que ver cómo funciona e intentaremos seguir sus pasos en los siguientes meses/años.
Referencias: