El juicio entre Google y Oracle es francamente una novela de suspenso, pues cada día que pasa hay nuevas noticias al respecto que lo hacen más dramático y emocionante. Por ejemplo, los abogados de Oracle han dejado en claro que su demanda es contra Android, y para defenderse, Google ha presentado una serie de diapositivas que ponen una perspectiva diferente del asunto. Google indica que Java es un lenguaje gratuito y abierto y eso es del conocimiento público, por lo que al construir Android, se hizo bajo esa legítima base. Sin embargo, a decir de Google, Oracle quiere hacer ver que el sistema operativo móvil le pertenece porque está construido bajo Java, que es de ellos, y con esto buscan abrir la cartera de Google para recibir dinero a través del licenciamiento. Las negociaciones en este sentido siempre han fracasado.
La presentación de Google inicia con las propias palabras de Ellison (véase aquí), en las que dice que Java es gratuito (libre), cita de 2011 en donde el CEO de Oracle admitió que “nadie es el propietario del lenguaje de programación Java”, y que cualquiera puede usarlo sin tener que pagar regalías de ningún tipo.
Inmediatamente después de esto, el asunto gira hacia el tópico de los APIs de Java (que son las bibliotecas que le dan mucha más funcionalidad al sistema) y que es donde Oracle sustenta su caso. Parte de las acusaciones de Oracle son respecto a la propiedad intelectual, lo que significa en este caso, 37 APIs de Java que supuestamente Android usa sin permiso.
Google dice que sin los APIs, la funcionalidad de Java es prácticamente nula y que si el lenguaje es considerado libre y gratuito, entonces es un asunto de lógica elemental pensar que los APIs también lo son. La compañía volvió a citar al CEO de Oracle, que en 2011 dijo: “Bueno, si no hubiese APIs, solamente tendríamos un lenguaje. Podríamos ser capaces es escribir cálculos básicos pero sin poder nada de I/O (entradas/salidas), es decir, ninguna comunicación con el mundo exterior a partir de la plataforma”.
Google entonces pasó a establecer un patrón de buenas intenciones. Primero, haciendo referencia al correo de 2006 del entonces CEO de Google, Eric Schmidt, al de Sun, Scott McNealy, en donde Schmidt sugiere que las dos compañías formen una alianza alrededor de la plataforma móvil abierta para telefonía celular, así como detallando una lista de las ventajas del código abierto de Android, incluyendo el kérnel de Linux y el uso del WebKit para el motor de navegación. Sin embargo, el núcleo de la disputa cae de nuevo en esos 37 APis. Google ofrece ejemplos donde los APIs de Android difieren sustancialmente de aquellos que aparecen el el JDK de Oracle. Por supuesto, en su propia presentación, Oracle fue capaz de dar ejemplos donde hacen lo mismo que los APIs de Google.
Un punto crítico en la línea narrativa de Google es la parte de adquisición de Sun por parte de Oracle. Google ofrece muchos ejemplos del CEO de Sun Jonathan Schwartz, que muestran la utilización de Java en Android —ambos de manera pública y privada— presentando estos ejemplos como el apoyo claro al equipo que estaba escribiendo Android. De nuevo Ellison es citado, en donde alaba los esfuerzos de Sun por mantener a Java en formato abierto y apelando a que se mantuviese esa tónica cuando se concretara la venta de Sun por Oracle. Ellison de hecho —citado de nuevo— dijo que el crecimiento continuo de Android era “muy emocionante”. Una admisión tácita del soporte a un Java abierto, a los ojos de Google, evidentemente.
Entonces Google fue al ataque. En un correo entre Ellison y McNealy, en donde Ellison bosquejaba un plan para construir un competidor del iPhone basado en Java, sirvió como el punto de salida. Google hace notar la incapacidad de Oracle para lanzar dicho proyecto de manera exitosa, incluyendo la llamada iniciativa (fallida) Project Java Phone. Ellison de hecho testificó y aceptó que habían considerado comprar Palm o RIM para entrar al mercado de la telefonía. Ninguna de las opciones llegó a buen puerto. La única alterrnativa que le quedaba, de acuerdo con Google, fue intentar vender su supuesta propiedad de Java a Android, llevándolos a la demanda que está litigándose.
Esta es una historia que cada vez parece ser más dramática. Sobretodo si consideramos que, de acuerdo con Google, solamente una muy pequeña porción de los 15 millones de líneas de código que tiene Android usa los APIs de Oracle, y si esto es así, la penalización por ello puede ser absurdamente baja para las pretensiones de Oracle. Google ha presentado al demandante como un buscador de oro (gold digger) en donde no hallan qué hacer para hacerse de más dinero.
Se pueden ver las diapositivas de Google aquí.
Fuente: The Verge