Google reveló que ya ofrecerá Google Fiber, su servicio de internet ultrarrápido, en la ciudad de Kansas, en Estados Unidos, por la asombrosa cantidad de 70 dólares al mes. Para superar a las compañías telefónicas y de televisión por cable, Google ha pasado meses y ha gastado una desconocida cantidad de dinero para la introducción de fibra óptica en la región. Al final, esta oferta pretende ser un ejemplo de lo que es técnicamente posible y una prueba para el desarrollo de nuevas formas en el uso de internet.
Después de vencer a varios contendientes, el área metropolitana de Kansas City fue anunciada el año pasado como la primera zona en tener el servicio de banda ancha ‘Fibra para las comunidades’.
Algunas ciudades usaron trucos para tener la atención de la compañía. Topeka, por ejemplo, se renombró informalmente como ‘Google, Kansas’. Un grupo en Baltimore lanzó un sitio web que usaba el servicio de mapeo de Google para trazar la ubicación de más de mil residentes y explicarles los motivos para querer el servicio del gigante de internet.
Con los 70 dólares al mes, los usuarios podrán tener servicio de internet ‘gigabit‘, cerca de cien veces más rápido que un servicio de internet por cable. Por otros 50 dólares mensuales, Google ofrecerá un servicio similar a la televisión por cable por la misma fibra y una tableta que funcionará como control remoto.
Según Google, al principio sólo conectará en vecindarios que tengan el suficiente número de personas que quieren el servicio, así que los residentes tienen seis semanas para registrarse, tras las que Google decidirá qué áreas tienen el suficiente interés.
La compañía también ofrecerá una opción de internet más barata y lenta, de 5 megabits, similar al DSL. Para tenerla, sólo se necesitará pagar 300 dólares de instalación sin renta mensual. El servicio estará garantizado por al menos 7 años, pero también será ofrecido sólo en barrios con la suficiente gente registrada.
¿El lanzamiento de este producto motivará a la competencia a ofrecer un mejor servicio por un costo justo? Esperemos que sí.
Referencias: Yahoo y The Inquirer