El órgano francés de protección de datos rechazó una apelación de Google a una orden de hace unos meses que obliga al gigante de las búsquedas a ampliar el “derecho al olvido” europeo a cada uno de sus sitios en todo el mundo, incluido Google.com. Y es que la compañía había estado cumpliendo con las solicitudes para eliminar los resultados de búsqueda sólo en la versión del motor del país de dónde éstas llegaron.
Debido a ello, Google ahora se enfrenta a dos multas, así como a la posibilidad de ver el caso llegar a un nivel más amplio en toda Europa, lo que haría que los legisladores pudieran establecer un criterio más amplio del controvertido concepto de privacidad que permite a los ciudadanos europeos pedir a Google eliminar resultados desfavorables de su persona.
La Comisión Nacional de Informática y Libertades de Francia, conocida como CNIL, dictaminó en junio que Google debe ampliar sus prácticas de desmontaje a todos los nombres de dominio, incluidos los de aquellos países con mayor protección alrededor de la libertad de expresión. La institución dio a la compañía 15 días para comenzar con el proceso o de lo contrario enfrentaría sanciones de hasta 150,000 euros, algo que no implicaría mucho problema para una de las corporaciones más poderosas del planeta.
Google apeló inicialmente la decisión de la CNIL en el mes de julio, diciendo que expandir el derecho al olvido a otros dominios daría a gobiernos autoritarios la posibilidad de censurar información en Internet a escala global. La institución rechazó la apelación y dijo que no tenía interés de ayudar a los gobiernos de otros países a hacer mal uso del derecho al olvido. Y es que ésta, junto con otros reguladores, ha encontrado que incluso después de que los resultados de búsqueda se eliminan con éxito, éstos aún son fácilmente localizados con simplemente cambiar la versión de Google a otro país.
Referencia: Wall Street Journal