Los terremotos son uno de los fenómenos naturales más constantes en diversas regiones del mundo. En el caso de México sabemos que varias veces al año hay actividad sísmica en nuestro país, y en algunas ocasiones estos terremotos han llegado a cobrar cientos o miles de vidas.
Sin embargo, aunque existen tecnologías capaces de detectar una actividad sísmica con antelación, la realidad es que a veces el tiempo no es suficiente como para poder salir de un edificio o establecerse en una zona segura, pero Google puede cambiar eso muy pronto.
Detectando terremotos con cables submarinos
Sabemos que hoy en día el Internet llega a todo el mundo gracias a enormes cables submarinos distribuidos en varias partes de los océanos. Google cuenta actualmente con 14 cables submarinos con una longitud de 112 mil kilómetros, y es la empresa con este tipo de infraestructura submarina más grande del planeta.
Sin embargo, Google lleva tiempo utilizando estos cables de fibra óptica para detectar terremotos. Y si bien esta idea no es nueva ni de la autoría de la empresa de Mountain View, actualmente son los únicos que han avanzado bastante en el proyecto y que cuentan con datos interesantes que demuestran que todo esto sí es posible y ayudaría a salvar vidas en todo el mundo.
Para detectar estos terremotos, la gran G utiliza los pulsos de luz enviados a través de los cables, los cuales son analizados por un receptor en el otro extremo del cable. El análisis de datos de este receptor revisa el estado de polarización, pues según los investigadores, los cambios en el estado de polarización en respuesta a las perturbaciones mecánicas a lo largo del cable y el seguimiento de estas perturbaciones es lo que permite detectar la actividad sísmica.
Un proceso complicado
Detectar un sismo con los cables submarinos no es tarea sencilla, pues Google dice que el problema con este método es la gran cantidad de datos que se deben analizar para detectar la magnitud y la ubicación, por lo que la compañía pide tiempo para mejorar el sistema, sin embargo, las primeras pruebas ya demuestran su efectividad.
El 28 de enero de este año la compañía logró detectar un sismo de 7.7 grados en Jamaica a más de 1,500 kilómetros de uno de sus cables submarinos, y 5 minutos antes de que ocurriera el sismo detectaron el cambio en el estado de polarización.
Asimismo, han detectado sismos de 6.1 a 2 mil kilómetros de sus cables.
Por ahora la compañía ya trabaja con el Laboratorio Sismológico del Instituto de Tecnología de California para poder mejorar su análisis y resultados y empezar a usar este tipo de tecnología como una forma efectiva para alertar a la gente con muchos minutos de antelación antes de un terremoto o tsunami.