FTX anunció hace unos días que se encontraba en bancarrota y sin duda fue una gran sorpresa que un gigante de las criptomonedas cayera de esta forma cuando se encontraba en un buen momento.
La empresa se quedó sin liquidez después de que muchos usuarios se fueran de ahí por las diferentes dudas que existían, por lo que iniciaron los problemas a las criptodivisas.
La plataforma quebró, su exCEO Bankman-Fried salió corriendo y de a poco vamos conociendo todo lo que fue ocurriendo por detrás de esta situación, por lo que vamos por partes.
FTX y su fin
FTX puso enfrente de esta situación a John Ray, un experto en reestructuración de grandes empresas y con él llegaron nuevos datos muy alarmantes de lo que sucedía, pues el propio Ray declaró que «en sus 40 años de experiencia legal y de reestructuración», nunca había visto algo igual.
«FTX Group no ha mantenido en este tiempo un control centralizado de su efectivo. Los errores en los procedimientos de gestión de efectivo incluyeron la ausencia de una lista precisa de cuentas bancarias y signatarios de cuentas».
John Ray publicó un primer informe donde menciona que numerosos bienes raíces se registraron a nombre de empleados de la compañía, y que prestaron 1,000 millones de dólares a Sam Bankman-Fried.
La empresa declaró que poseía 5,500 millones de dólares en criptodivisas, pero a finales de septiembre solo disponían de 659,000 dólares, un pérdida muy llamativa para una marca tan bien posicionada.
Sam Bankman-Fried realizó varias operaciones de riesgo con el nombre de su compañía y tampoco existía una lista con las cuentas bancarias de la empresa, e inclusive los gastos e inversiones de la firma se aprobaban con un simple emoji, algo sorprendente pero cierto.
FTX cayó y puede ser el inicio de algo malo para el mundo de las criptodivisas, por lo que veremos cómo va evolucionando la situación en este caso.