Hace unos minutos se confirmó que Facebook adquirirá a WhatsApp, la famosa app de mensajería, por una cantidad de 16 mil millones de dólares. Esta compra, de la que se habló a finales de 2012, finalmente llegó a un acuerdo entre las compañías.
Si bien, existen otros servicios de mensajería como LINE, WeChat, Facebook Messenger, Snapchat, BlackBerry Messenger y ahora Telegram, no cabe duda que WhatsApp es “el Rey”. Es natural que Facebook quiera ser el dueño del servicio de mensajería que desde hace rato, es visto como la “gallina de los huevos de oro” pues tecnológicas como Microsoft, BlackBerry y Google -que fue un posible comprador en el pasado– sabían que quien tuviera a WhatsApp tendría un negocio en potencia.
Según un comunicado, Facebook comprará a WhatsApp por 12 mil millones de dólares en acciones más 4 mil millones en efectivo; cantidad 16 veces mayor a la que se utilizó en la compra de Instagram hace un par de años. Supuestamente, WhatsApp seguirá operando de manera independiente –incluso de Facebook Messenger, que es un rival– y permitirá que Facebook amplié su mercado a diferentes usuarios.
“WhatsApp está en camino a conectar a mil millones de personas. Los servicios que alcancen esa marca son increíblemente invaluables. He conocido a Jan por mucho tiempo y estoy emocionado de asociarme con él para hacer el mundo más abierto y conectado”, dijo Mark Zuckerberg en un comunicado. Por su parte, el CEO de WhatsApp, Jan Koum, quien se unirá a la junta directiva de Facebook comentó: “No se hubiera realizado ninguna asociación entre las compañías si hubiéramos tenido que comprometer los principios centrales que siempre definirán a nuestra empresa, nuestra visión y nuestro producto”.
Según el documento, cerca de 450 millones de personas al mes emplean WhatsApp, alcanzando cerca de 1 millón de usuarios nuevos al día en todo el mundo. Del total, 70% de las personas se mantienen en comunicación activa por esta vía cotidianamente.
Koum comentó en su blog que los usuarios seguirán empleando el servicio por el costo anual acostumbrado y que no se insertarán anuncios que “interrumpan su comunicación”.