Durante años se nos ha dicho que la luz que produce la pantalla de los smartphones podría lastimar nuestros ojos por la noche y también podría impedir que logremos conciliar el sueño, de ahí que una de las características que ha tomado popularidad en los últimos años es la de luz nocturna o Night Shift, función que incluso ya se encuentra por defecto en la configuración de Android y iOS e incluso es posible de programar para que se active a cierta hora del día.
Esta función lo que hace es atenuar o apagar el pixel de las pantallas en color azul, por lo que al final todo se vuelve un poco más de color amarillo, protegiendo así nuestros ojos del brillo que produce la luz blanca de la pantalla de nuestro smartphone.
Otra de las grandes ventajas de las que siempre se habló con este filtro de luz azul es que estos tonos amarillentos nos ayudaban a dormir mejor e incluso reducían síntomas como la migraña debido a que ayudaban a generar una proteína en la retina llamada melanopsina, aunque en realidad parece que todo esto es simplemente en efecto placebo.
La ciencia revela los efectos del filtro azul
Un estudio realizado por la Universidad de Manchester ha revelado que el filtro de luz azul o luz nocturna en realidad no sirve para nada de lo que prometen, donde incluso han mencionado que son más los daños que los beneficios que se generan con la luz amarilla en la pantalla del celular.
Para llegar a esta conclusión han utilizado ratones en el experimento, donde descubrieron que el filtro de luz azul no solo no genera tanta melanopsina como se cree, sino que el hecho de generar esos mayores tonos amarillos impiden que en verdad podamos conciliar el sueño.
Esto significa que la luz nocturna no sirve para muchas de las cosas por las que muchos usuarios la utilizan, pues a pesar de que sí podría cuidar tus ojos en ambientes oscuros, no ayuda a reducir la migraña y tampoco permite que puedas dormir mejor.