Para este momento ya debes de saberlo, pero no importa, es una noticia que debe de llenarnos de orgullo y que tenemos que destacar.
Hasta ayer sólo 4 pilotos mexicanos han sido parte de la Fórmula 1; los Hermanos Pedro y Ricardo Rodríguez, Moisés Solana y Héctor Alonso Rebaque.
Hoy, un joven de tan sólo 20 años regresa el nombre de México a la máxima categoría del automovilismo internacional. Su nombre Sergio “Checo” Pérez. Subcampeón de la GP2, categoría antesala de la F1. Pero lo mejor de todo, es que no viene sólo, viene acompañado por otro campeón Esteban Gutiérrez quien será el piloto de pruebas de la nueva escudería de Checo: BMW Sauber.
“Checo” como la mayoría de los campeones, empezó su carrera en el karting, del cual fue campeón en 5 ocasiones. Después empezó a manejar autos en la Fórmula BMW y más tarde pasó al campeonato inglés de Fórmula 3 en donde obtuvo14 triunfos parciales. En el 2008 y con tan sólo 18 años, fue el campeón más joven de las series asiáticas de la GP2.
No podemos dejar de lado, que todo esto es posible gracias a diversos factores, en primera el talento y las manos de Sergio, eso es indiscutible. En segunda al apoyo de su patrocinador Telmex y del señor Carlos Slim Jr. y en tercera y no menos importante, la destacada tutoría de Adrián Fernández, quién ha apoyado y guiado al joven a través de este maravilloso y exigente mundo de las carreras, creo que su experiencia ha sido la diferencia.
Checo es un chavo centrado, maduro y tiene lo que se necesita en una carrera como esta, para llegar lejos. En mi opinión, lo primero que tiene que lograr, es asegurar su asiento en la máxima categoría. Los campeonatos, si llegan, vendrán después. No podemos esperar que Sergio se suba al monoplaza y triunfe en un dos por tres o como por arte de magia, recordemos que se trata de la Fórmula 1 y llego para competir con los mejores del orbe. Repito, talento lo tiene, pero habrá que esperar.
Tuvieron que pasar 28 años para que un mexicano regresara a la Fórmula 1. Hoy ya es una realidad y debemos estar muy contentos y orgullosos porque no sólo hay uno, sino 2 de nuestros compatriotas y créanme que están un lugar verdaderamente privilegiado.
Ojala nuestro país empiece a exportar talentos en el automovilismo como lo hace Brasil y que haya más apoyo de la iniciativa privada para asegurar que los éxitos sigan y sigan.
Señores, no todo es futbol, volteemos para otros lados, apoyemos a otros deportes que sí nos regalen satisfacciones, hay varios ¿eh? Pero por lo pronto, empecemos con estos jóvenes a los que les auguro un brillante futuro.