La privacidad es de esos temas que siempre son polémicos. Hay quien dice que los que están muy preocupados, exageran porque «el que nada debe, nada teme», por lo que no tienen problemas en aceptar que alguien los vigile y recolecte información sensible para muchos ciudadanos. Otros indican que, más allá de que nadie tiene nada que esconder, está en su derecho de mantener privados ciertos datos.
Con esto presente, la Comisión Nacional para la Protección de Datos de Francia (CNIL por sus siglas en francés) ordenó a Microsoft cumplir con el Acta de Protección de datos de Francia y para ello ha dado un plazo de tres meses, en los que deberá de «dejar de recolectar datos excesivos y monitorear la navegación de los usuarios sin su consentimiento».
Además de esto, la CNIL notificó a la compañía que se necesitan tomar «medidas satisfactorias para tener seguridad y confidencialidad de los datos de los usuarios».
A Microsoft se le acusa no solamente de hacerse de excesiva cantidad de datos sobre los usuarios, sino también de recabar información irrelevante. La CNIL dice que los servicios de telemetría de Windows 10, el cuales toma la información de las apps que los usuarios han instalado y el tiempo que han estado con estas apps, están fuera de lugar. La queja es que «estos datos no son necesarios para la operación del servicio».
También la compañía ha sido criticada por la falta de seguridad, tal como el hecho de usar un número de cuatro cifras para proteger los pagos en donde no hay límite para que alguien haga todas las combinaciones. La CNIL ha mostrado una serie de quejas que no terminan aquí. También considera que la información está saliendo de Europa a Estados Unidos sin el consentimiento de los usuarios.
De acuerdo a una notificación formal, la CNIL decidió informar a Microsoft sobre la necesidad de que cumpla con el Acta mencionada en los siguientes tres meses. El propósito de esto no es prohibir que Microsoft, por ejemplo, no ponga anuncios en sus servicios, sino permitir a los usuarios tomar las decisiones pertinentes, así como ser informados de sus derechos.
Se decidió dar este paso formal porque hay serias deficiencias en el tema de la privacidad y hay más de 10 millones de usuarios de Windows en el territorio francés. Y aunque quizás más de uno pensará que esto no llegará más lejos, hay que decir que la queja presentada por los franceses parece que ya ha sido tomada en cuenta por los alemanes los cuales, son más quisquillosos aún con el asunto de la privacidad.
Referencias: TechEye