Las copias de las contraseñas, las cuales aparentemente incluyen a usuarios de la armada norteamericana, organizaciones de seguridad informática y empresas importantes de comunicación, fueron puestas en Internet por el colectivo de hackers llamado Lulz Security, quien se achaca el crédito de los ataques de la semana pasada.
En una declaración de Lulz Security, se dice que se usó una de las contraseñas para robar cerca de 1000 correos personales y de trabajo del jefe de la empresa de vigilancia de Wilmington, Delaware.
Lulz Security dice actuar en respuesta al reporte reciente de que el Pentágono estaba considerando si clasificar algunos ciberataques como actos de guerra.
El FBI dijo el domingo que estaba al tanto del incidente y que estaban tomando las acciones para minimizar el daño. Farley dijo que el sitio de InfraGard había sido dado de baja y que los miembros habían sido reconvenidos a cambiar sus contraseñas y estar al tanto de posibles ataques futuros.
Farley añadió que su grupo, una organización voluntaria, no había tenido antes contacto con Lulz Security, la cual se describe a sí misma como un colectivo de hackers que atacan sitios web poco protegidos solamente por diversión. Aparentemente los hackers tuvieron una semana complicada y muy ocupada.
El mismo domingo, Nintendo dijo que había sido atacado por aparentemente Lulz Security pero que no se había perdido información personal o de la compañía en el ataque.
El martes, Lulz Security atacó a Sony, haciendo que decenas de miles de datos de los usuarios de Sony se pusieran en Internet. También se le da crédito a este grupo de hackers por el ataque a PBS después de que la empresa difundiera su documental sobre el fundador de Wikileaks, Julian Assange.
Lulz Security se mantiene activo a través de Twitter y ha prometido más hackeo.
Fuente: yahoo news