La computadora Lisa (que es un acrónimo de Local Integrated Software Architecture, además de ser el nombre de la hija mayor de Jobs), se empezó a vender en 1983 a un precio astronómico de 10 mil dólares (unos 24700 dólares de hoy, ajustándolos a la inflación). Pero lo importante aquí es que está máquina fue la que fundamentalmente sirvió para crear lo que ahora llamamos el sistema operativo de la Mac, el Mac OS X.
El próximo año, en algún momento, los fanáticos de la marca e interesados en el tema, podrán revivir los días de la Lisa, pues gracias a los esfuerzos del Museo de la Historia de la Computación y en particular del curador Al Kossow, se liberará el código fuente de la Lisa. Una vez que Apple limpie el código, el museo planea liberarlo al público indicando la importancia del mismo en el desarrollo del cómputo.
Pero como era de esperarse, no se liberará todo el código estrictamente, aunque parece ser que solamente el American Heritage Dictionary, que se usaba en el corrector del LisaWrite (una aplicación de procesamiento de palabras), no estará en los fuentes del sistema, indicó Kossow.
Lisa fue la primera computadora con interfaz gráfica, diseñada para negocios, que corría a 5 MHz, con 1 MB de RAM y que usaba un sistema de archivos que podía administrarse a través del ratón y la interfaz gráfica, cosa que hoy hacemos todos los días.
Apple gastó unos 150 millones de dólares sen el desarrollo de Lisa y en los anuncios en donde Kevin Costner era el protagonista. Pero Apple sólo vendió 10 mil computadoras Lisa en el año 1983. Sin embargo, fue probablemente el elemento catalizador de su sucesor, la económica (relativamente), Macintosh, que se liberó el siguiente año.
«La Lisa estaba maldita de alguna manera porque era básicamente un prototipo, muy costoso, muy poco poderoso además», dijo Leander Kahney, autor y periodista de tecnología, en el 2010. «Lisa enseñó al equipo de Apple que había que tener un propósito específico para cada computadora».
Pero para rematar, la Lisa sin duda permeó en el futuro de la empresa, pues Jobs fue despedido del equipo de desarrollo de la Lisa por el CEO John Sculley y se fue hacia el equipo de la Mac. Sculley entonces le hizo la vida difícil a Jobs y nació la fisura que eventualmente llevó a Jobs a ser despedido de la propia empresa que creó, en 1985.