Este fin de semana, la categoría eléctrica del automovilismo está de vuelta en la Ciudad de México para su temporada 7; la Fórmula E se correrá este 19 y 20 de junio en el Autódromo Miguel E. Abed, de la ciudad de Puebla, tras un silencioso 2020. 

Los 24 pilotos a competir en esta fecha disputarán 15 vueltas a bordo de estos vehículos eléctricos, que a diferencia del automovilismo más conocido como el de la Fórmula 1, este es silencioso, sin emisiones tóxicas al ambiente, pero también está rodeado por varias tecnologías a bordo de cada monoplaza, por lo que las mismas escuderías incluso describen a esta categoría como “un laboratorio de experimentación para sus producciones”.

Estas son algunas de las claves tecnológicas que tal vez no sabías que juegan un papel importante durante una carrera de Fórmula E. 

Sensores: Si bien los autos de cualquier tipo integran cada vez más componentes tecnológicos, en los autos eléctricos de la Fórmula E se integran al menos 330 sensores de diferentes tipos mientras que en un monoplaza de Fórmula 1 puedes encontrar alrededor de 180 sensores, según datos de ABB. 

Ciberseguridad: Uno de los aliados de la Fórmula E son las empresas de ciberseguridad, las cuales se encargan de proteger los sistemas de comunicación y monitoreo de lo que sucede en los autos y en torno al circuito; un ejemplo de esto es la colaboración entre Fortinet y BMW. De acuerdo con la firma, para acciones como la aceleración, el manejo de temperatura o el análisis de sus datos en la carrera, los sistemas del auto dependen de un sistema de conectividad bajo una red privada VPN. 

Semiconductores: Al igual que con los sensores, la calidad de los semiconductores o procesadores a bordo de un auto eléctrico es clave. En específico en este circuito, una de las alianzas más importantes es con la firma estadounidense ON Semiconductor, la cual está enfocada en maximizar la eficiencia con la que la energía se conduce y distribuye en la superficie de los materiales internos del auto y de esta forma hacer un uso más eficiente de la energía. 

Manejo de energía: Uno de los aspectos tecnológicos más importantes del auto es el aprovechamiento de la energía dentro del mismo. Una de las reglas en este circuito es que los autos deben poder competir por 45 minutos con autonomía de batería a una velocidad aproximada a los 280 kilómetros por hora, lo que se vuelve en un reto en cuanto a materiales, procesos de datos y uso de baterías para usar y recuperar la mayor cantidad de energía posible en las 15 vueltas de las que se compone la competencia. 

El crecimiento en importancia de la Fórmula E ha traído también en paralelo compromisos de las empresas automotrices y los gobiernos para reducir sus emisiones tóxicas y a la vez impulsar la movilidad eléctrica, no solo como una categoría más en el automovilismo, sino como parte de la planeación de sus ciudades más limpias. 

El plan para la Ciudad de México, por ejemplo, es reducir 51% la emisión de gases invernadero hacia 2030, mientras que algunas empresas como BMW buscan colocar al menos 7 millones de autos eléctricos en las calles en 2030, lo que implica que dos tercios de toda su producción se volvería de este tipo. 

La consultora Ernest & Young advierte que gracias a la existencia de circuitos globales de automovilismo eléctrico como la Fórmula E es posible que se vendan en el mundo al menos 77 millones más de autos eléctricos.