Vivimos en una sociedad tan adaptada a las nuevas tecnologías, que nos encontramos inmersos en realidades digitales, en lugar de cuestionarnos si realmente todo el mundo se encuentra en las mismas circunstancias o no. Mientras que para algunos el acceso a Internet se trata de un servicio básico, como si fuera el gas, agua o la electricidad; en otros territorios, es prácticamente imposible contar con conexión.
Por ende, nos gustaría hacer mención de los países que cuentan con más restricciones al momento de querer estar conectados, ya sea por falta de recursos económicos, o porque simple y sencillamente el gobierno tiene estrictas cláusulas para acceder con diversas censuras y mucho control.
China
Uno de los países más grandes de todo el mundo, irónicamente, se caracteriza por tener leyes bien marcadas que censura la conexión a Internet. En China, desde el año 1996, se llevan a cabo distintas leyes administrativas por el Gobierno con el fin de filtrar todo el contenido que se publica, ya sea a través de IPs bloqueadas, palabras claves censuradas, entre otros aspectos.
Además, se estima que el país asiático cuenta con brigadas de Internet conformadas por más de 30 mil miembros que buscan controlar el contenido mediante la aplicación de las leyes. Desde que China permitió el uso comercial de Internet en el año 1995, el gobierno ha promulgado por lo menos 60 regulaciones para que ninguna unidad o individuo pueda utilizar Internet para crear, reproducir, recuperar o transmitir movimientos políticos de protesta en los que se incite la división del país, el odio o la discriminación entre las nacionalidades.
A su vez, China quiere evitar a toda costa que la verdad sea tergiversada, difundiendo rumores que podrían destruir el orden de la sociedad, así como
Irán
Como es bien sabido, Irán es un país conocido por tener fuertes sanciones a cualquier actividad ciudadana que no vaya de la mano con la interpretación del Corán (libro sagrado del islam que contiene la palabra de Dios revelada a Mahoma). Si bien existe conexión a Internet desde los hogares, pero con muchísima censura.
De hecho, se estima que las autoridades iraníes bloquean el acceso a más de cinco millones de páginas web, entre ellas las redes sociales más populares como Facebook, Twitter, o YouTube, sitios de pornografía, entidades bancarias, medios de información que sean considerados como “hostiles”, y, por supuesto, páginas de organizaciones defensoras de derechos humanos y grupos opositores al régimen.
Sin embargo, esto no implica que los habitantes no encuentren ingeniosas maneras para salirse con la suya; incluso millones cuentan con redes sociales, pero deben pagar a expertos para poder desbloquear las limitantes, así como actualizar constantemente antifiltros. El gobierno ofrece Internet, pero regulado con información filtrada.
Cuba
Cuba es el claro ejemplo de que la tecnología es un arma de doble filo; o es utilizada para generar una revolución, o simplemente para derrocarla. De acuerdo con Wikipedia, la primera conexión a Internet en Cuba se realizó en septiembre de 1996 a 64 kbit/s. El acceso demoró debido a los obstáculos impuestos por el Gobierno de Estados Unidos. Fue hasta 2012 que la conexión era posible vía satélite.
El ancho de banda total entre Cuba y el resto del planeta era de solo 209 Mbit/s de bajada. En la actualidad, ya hay zonas con WiFi pública y a mediados de 2016 se alcanzaron al menos 3 plazas de las 15 principales ciudades cubanas, mientras que se prevé que hasta el año 2020 el 50 por ciento de los hogares cubanos tenga acceso de banda ancha. Por el momento, sólo un bajo porcentaje cuenta con Internet, ya que el servicio es sumamente costoso y sufre de un alto nivel de censura.
Eritrea
Eritrea es un país situado al noreste de África y, de acuerdo con Bloomberg, el territorio con apenas 6 millones de habitantes, tiene un triste récord a nivel mundial y es que el acceso a las comunicaciones es prácticamente inexistente y la gran mayoría de los ciudadanos jamás ha tenido acceso a Internet. La Corporación de Servicios de Telecomunicaciones de Eritrea, más conocida como EriTel, es el único operador en la infraestructura de comunicación de telefonía fija y móvil. La información es totalmente censurada y sólo el 1 por ciento de los ciudadanos accede a una línea y sólo el 5.6 posee un dispositivo móvil, lo que implica que dicho país se posicione con las cifras más bajas a nivel mundial… al menos hasta el año 2016.