El Mobile World Congress nos dejó muchas sorpresas, y una de ellas fue Nokia, que anunció que de hoy en adelante todos sus smartphones pertenecerán al programa Android One, salvo los gama baja, que serán los que saldrán al mercado con Android Go.
Y es que de un momento a otro hemos visto como Android One tomó popularidad entre los diferentes fabricantes del mercado, y gracias a ello es probable que Android One marque el futuro del sistema operativo de Google, pues es lo que desde un principio tuvo que haber sido Android.
Ya habíamos explicado las diferencias entre Android One y Android Go, pero para recapitular un poco, Android One es un programa en el que el fabricante ofrece una experiencia Android pura, sin añadidos ni complicaciones, con la última versión de software Android, actualizaciones de seguridad mensuales y un soporte de «upgrades» de por lo menos dos años, en resumen, Android One es lo más parecido a lo que un día fue el programa Nexus.
La diferencia entre los Nexus y los Android One es que en los primeros Google es quien realiza las actualizaciones de software y seguridad, mientras que en los Android One cada fabricante debe hacerse cargo de ello, aunque no deberían tardar más de unos días o un par de semanas en tener lista la actualización.
Que una marca como Nokia haya decidido apostar de lleno por el programa es algo muy bueno para los usuarios, sobre todo después de saber que la firma finlandesa vendió más smartphones que Sony y OnePlus en 2017, y que planea estar en el top 5 de marcas más vendidas en el mundo en los próximos años.
Y es que ha sido la propia Nokia quien mencionó que Google está muy satisfecha con el trabajo de la marca, y como dato curioso, sólo Google puede seleccionar a los fabricantes que pueden lanzar un smartphone con Android One, de ahí que lo comparemos con el programa Nexus.
Hasta el anuncio de Nokia en el Mobile World Congress sólo podíamos contar 4 smartphones con Android One de compañías importantes, como son el Xiaomi Mi A1, HTC U11 Life, Moto X4 y BQ Aquaris X2, pero con los recientes Nokia tenemos 3 nuevos modelos como el Nokia 7 Plus, Nokia 8 Sirocco y Nokia 6 2018. Además de que esperamos la llegada del Nokia 9 y 8 Pro para el tercer trimestre del año.
Esto significa que más gente podrá optar por dispositivos de gama media, media alta y alta con una experiencia Android notable, por lo que no tendrá que hacer corajes cuando una actualización no le llegue, o cuando sepa que su fabricante tardará más de un año en lanzar la última versión de Android disponible, y cuando lo haga ya habrá una versión aún más nueva en el mercado.
¿Los fabricantes si actualizan sus teléfonos? Lo hacen, no me queda duda, pero se apuran con sus gamas más altas, es decir, con esos teléfonos que cuestan más de 15 mil pesos, y aun con ello el tiempo de espera es una ridículo, ¿pero qué pasa con sus gama media? esos teléfonos prácticamente nunca reciben actualizaciones de sistema operativo, y si lo hacen son contados.
Con Android One esto podría cambiar, podríamos dejar de preocuparnos por las tardadas actualizaciones, la fragmentación de Android podría acercarse notablemente a las cifras de iOS y sobre todo mejorará exponencialmente la experiencia con teléfonos que llevan 2 o 3 años en el mercado y que debido a las capas de personalización son mucho más lentos en casi todos los procesos.
Muchos fabricantes se escudan que con sus capas de personalización, dígase Samsung Experience, EMUI, MIUI, HTC Sense o la que se te venga a la cabeza se diferencian de los demás y ofrecen novedades que muchas veces Android Stock (o puro) no incluye, tal vez este punto sea cierto, pero sus capas terminan por mermar la experiencia a la larga.
Yo siempre he mencionado que en Android se puede hacer prácticamente cualquier cosa, si necesitas una función que tienen los Samsung, Huawei, Xiaomi o cualquier otra firma en su launcher o sistema, entonces puedes incluirla en tu teléfono con una aplicación, por lo que no encuentro una sola razón que me convenza que una capa de personalización es mejor que Android Stock.
En mi opinión, muchas de las firmas quieren vender teléfonos año con año mejorando algunas características de hardware, pero en el software nunca hay un cambio notable, y aunque no me consta que las firmas en verdad intentan retrasar las actualizaciones de software para “obligar” a los usuarios a comprar nuevos smartphones, con Android One esto será muy diferente.
Me parece que Google ha decidido apostar fuerte por Android One, y aunque tardará algunos años en dar frutos creo que si todo sigue su curso pronto podríamos ver un cambio importante en el futuro y la fragmentación de Android.