Aquí en unocero.com hemos hablado del premio Loebner, que consiste en escribir un programa que pase la prueba de Turing, es decir, que engañe en una conversación a un ser humano que cree platicar con un igual y no con una computadora. Pues este año, el ganador fue Chip Vivant, creado por Mohan Embar, un consultor de software que radica en Milkwaukee, Estados Unidos.

En la última ronda del concurso, que se llevó a cabo en Bletchley Park el 15 de mayo de 2012, hubo 4 finalistas. Sin embargo, ninguno de ellos pudo engañar a los jueces para hacerlos pensar que estaban con un ser humano y no una máquina (lo cual los haría acreedores a la medalla de oro del premio Loebner). No obstante esto, el ganador recibió la medalla de bronce Loebner y $5000 dólares por su programa.

Mohan Embar, quien ha participado en esta competencia desde 2008 sin interrupción y en la que fue finalista en 2009 y 2011, escribió en su sitio web: “Me siento muy contento. Este año los jueces fueron absolutamente maravillosos. Sabían que Chip era un robot platicador, pero fueron comprensivos, indulgentes y analizaron las características correctas”.

Las ‘características correctas’, de acuerdo con Embar son: “Responder preguntas básicas, de sentido común y un intento por dotar de razonamiento simple deductivo en lugar de tener una inmensa base de conocimientos o bien un conjunto de respuestas en el mejor estilo del programa Eliza.

A otro de los programas participantes, Angela, creado por Bruce Wilcox, se le concedió el segundo premio ($1000 dólares), en donde el software insistía que era un gato en lugar de un ser humano, algo que explicaba en su página de Facebook, ‘Talking Angela’. Ya Wilcox había ganado las competencias de 2010 y 2011, con Suzette y Rosette, respectivamente y además ha hecho su código abierto. Talking Angela, incluso, estará disponible como app para iOS y Android.

Si se leen las transcripciones de las conversaciones, las cuales se pudieron seguir en vivo durante el evento, se nota que el progreso de los robots parece haberse detenido. Tal vez no ayuda a la competencia que aún se use un teclado cuando ya se tiene reconocimiento de voz.

Marvin Minsky, considerado por muchos como el padre de la inteligencia artificial y en donde supuestamente se ha convertido el  responsable de detener el progreso en áreas como las redes neuronales por más de una década, ha dicho desde 1995 que el premio Loebner es simplemente “una campaña anual de publicidad totalmente improductiva”. Tal vez Minsky piense que para recuperar el status del tema de la prueba de Turing se necesitaría que la academia empiece a participar o incluso Google. Los entusiastas han hecho un trabajo razonable,sin duda,  pero tal vez ha llegado el momento de que pase a manos de los profesionales.

El 23 de junio, natalicio de Turing, habrá otro concurso similar al Loebner, en donde participarán exganadores de este premio: Rollo Carpenter, creador de CleverBot y Jabberwacky, ganador del premio Loebner en 2005 y 2006; Robby Garner, quien ganó este premio en 1998 y 1999 con Albert One; Robert Medeksza, con Ultra Hal ganador en 2007 y Fred Roberts que, junto fue con Elbot, ganador del premio el siguiente año. También estarán el equipo de Vladimir Veselov, creadores de Eugene Gootmasn, que fue segundo lugar en 2001, 2005 y 2008. Quizás este evento resulte más convincente.

Referencias: Transcripciones de las pláticas con los programas (Loebner 2012) La prueba de Turing y los robots que conversan