Después de una serie de arrestos a principios de este mes en la India, a empleados de un “call center”, el cual actuaba como si fuesen agentes del IRS (Internal Revenue Service) o de migración, se reporta que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha presentado cargos contra 61 personas en los Estados Unidos y la India, quienes facilitaron la operación fraudulenta, haciendo que millones de estadounidenses pensaran que estaban enfrentando arrestos inmediatos así como persecución.
De acuerdo al documento legal, que cubre a 20 individuos en los Estados Unidos y a 32 personas y cinco “call centers” de la India, desde 2012 han estado usando información para hacerse pasar por agentes de la oficina de impuestos o de servicios de inmigración. El reporte añade:
“Para darle a las llamadas un aire de autenticidad, la organización fue capaz de modificar los números de teléfonos, haciendo que aparecieran como si las llamadas ocurrieran de agencias federales”.
Los que llamaban amenazaban a las víctimas potenciales con arrestos, multas, penas de cárcel e incluso deportaciones si no pagaban unos supuestos impuestos o penas al gobierno. En las instancias en las que las víctimas decidían pagar, el Departamento de Justicia indica que los call centers instruían a las víctimas a ir a bancos, sacar dinero y usar esos fondos para comprar tarjetas prepagadas que podían usarse en tiendas.
Las tarjetas tienen un número de identificación único que los que llamaban les pedían a las víctimas. En ese punto, los fondos de dichas tarjetas se transferían a tarjetas recargables prepagadas. Las tarjetas entonces se usaban para comprar órdenes de dinero que se transferían a cuentas de individuos o a la de ciertos negocios.
Para hacer las cosas peores de lo que ya eran, el documento legal indica que las tarjetas prepagadas se registraban frecuentemente con la información de miles de personas que eran las víctimas y que las transferencias de dinero se hacían vía estas organizaciones usando nombres falsos e identificaciones fraudulentas.
La operación entonces usaría los llamados ‘halawas’, que es un sistema en el que el dinero es transferido internacionalmente fuera del sistema formal de bancos, y de ahí pasaba a las diferentes cuentas de los defraudadores.
Es interesante, más allá del mecanismo para sacarle el dinero a las personas, el hecho de enmascarar las operaciones fraudulentas haciendo creer a la víctima que se hablaba desde una organización del gobierno.
Hoy en día hay que ser más que cuidadosos en estos temas y no asustarse prematuramente, sino ver los detalles, las formas, lo que piden algunas personas y así ver si se trata de un fraude o no.
Referencias: Justice.org