Los casos de ciberataques son el pan de cada día, pues todo el tiempo se está dando a conocer que existen cientos de personas que son víctimas de ello.
Por esta razón y para evitar que la cifra de hackeos se incremente, se darán a conocer algunas de las señales que indican que se es un blanco fácil en la web, lo cual provoca que los ciberdelincuentes los vean como carnada.
De acuerdo a esto se recomienda que si se realiza alguna de las siguientes acciones, se tiene que parar ahora mismo y considerar un cambio de actividades.
Señales que indican si eres una carnada fácil en la web
Se confía ciegamente en el asunto del correo
Esto puede parecer de 2012, sin embargo, es algo que sigue pasando con mucha frecuencia, ya que la gente continúa dejándose llevar por el asunto de los correos y sobre todo, por el cuerpo de los mensajes.
Prueba de ello, son los cientos de casos donde los usuarios dan clic en los links de herencias, premios millonarios y hasta peticiones, los cuales por supuesto son falsos; con base en esto, se recomienda leer con atención y dejar pasar aquellos emails que se consideren peligrosos.
No se revisa la dirección del correo de los remitentes
Siguiendo bajo la línea de los correos, existe gente que aún cree que los nombres que vienen en los mensajes son reales y que por ende, son de fiar, sin embargo, eso no siempre es así y resulta ser todo lo contrario.
Por ello se aconseja que además de leer muy bien, se fije en la dirección de email que está escrita, ya que los sitios de correo gratuitos como el Gmail y Hotmail no son los que utilizan las empresas legítimas. De acuerdo a esto, los correos de bancos, empresas o servicios de los que no se es parte, deben quedar totalmente descartados.
Se abren los archivos adjuntos de los correos no solicitados
Esta es una práctica común que no ha parado de llevarse a cabo y que debe terminar pronto, porque de esta manera se le está abriendo la puerta a los virus y hackers; así que si llega un email con los dos aspectos anteriores y este, entonces se debe desconfiar de manera inmediata.
En dado caso que esto suceda y que sea un correo con archivo adjunto que rellenar de una institución que sí se conoce, también se debe dudar, porque ninguna entidad financiera (que son las organizaciones involucradas más comunes) pide información personal de esta forma.
No conocer la URL del sitio que se está buscando
Uno de los peores errores que realizan las personas, es que no saben cuál ni cómo es el sitio al que deben ingresar, por lo que se introducen al primer resultado que la búsqueda les arroja, lo cual es aprovechado por los cibercriminales.
Lo último se dice porque éstos llegan a suplantar la identidad de los servicios legítimos con el fin de engañar a las personas para que les den su información personal sin desconfiar, de acuerdo a esto es que siempre se debe de tener la certeza de qué y cómo se va a buscar.
No se revisan las URL de destino
Cada vez que se abra un correo, se debe poner mucha atención en la URL a la que se quiere re direccionar, pues en muchas ocasiones este es el gancho para que se introduzca al usuario en sitios que le robarán su información en cuestión de segundos.
La recomendación es que se revise el hipervínculo para saber si coincide con lo que se está explicando y para esto bastará con pasar el cursor sobre éste, aunque si se trata de un link corto, entonces se pueden usar herramientas como Unshorten.It que descubrirán el contenido del enlace antes de abrirlo.
Se tiene demasiada confianza en las webs que tienen el HTTPS
Este apartado significa que se entra de manera confiada a todos los sitios que contienen el https y un candado en el inicio de su URL, pues creen que es algo seguro, pero eso ya no es suficiente indicio para confiar.
Se tiene mucha fe en las plataformas masivas
El que un sitio web sea sumamente popular, no quiere decir que sea confiable, al contrario, puede ser que esta sea una técnica que usan para engañar a los internautas y de esta manera puedan robar sus datos.
Compartes mucha de tu información personal a través de las redes sociales
El que todo el tiempo se esté compartiendo la información de la ubicación o de los amigos con los que se está puede ser un riesgo que muchos saben, pero que pocos evitan, pues está subestimando lo que la gente puede hacer con este tipo de datos.
Por lo tanto, se sugiere que se tenga muy bien identificado qué tipo de personas se tienen agregadas en las redes sociales y qué se publica, porque eso puede marcar la diferencia.