El cómputo moderno está lleno de personajes que muchas veces hacen contribuciones importantes pero que están lejos de la mirada pública. Así pasaron relativamente desapercibidos programadores como Ritchie, el inventor del lenguaje C y coinventor de Unix con Ken Thompson, personas que contribuyeron a que la computación sea como la conocemos. Otro caso es el de Barbara Liskov, seleccionada para pasar al Salón de la Fama de los Inventores de Estados Unidos en 2012 por sus contribuciones a los lenguajes de programación y al diseño de sistemas.
La profesora Liskov es la investigadora principal en el laboratorio de ciencias de la computación e inteligencia artificial del Massachussets Institute of Technology (MIT) y ha recibido reconocimientos como el premio Turing (en 2009), que la coloca al mismo nivel que Thompson, Ritchie y el mismo Turing, y el premio Katayanagi en ciencias de la computación (en 2011). En 1996 ganó el premio al logro a la ingeniería femenil. También recibió la medalla Von Neumann en el 2004 y en el 2008 tuvo el galardón que da la Association for Computing Machinery (ACM) en su capítulo SIGPLAN, que tiene que ver con los desarrollos de los lenguajes de programación. De hecho, fue la primera mujer que obtuvo un doctorado del departamento de ciencias de la computación por la Universidad de Stanford, en 1968.
De acuerdo a un comunicado del Salón de la Fama de los Inventores de Estados Unidos, “la profesora del MIT, Barbara Liskov, es considerada una innovadora en el diseño de los lenguajes de programación, lo cual ha ayudado a hacer los programas de computadoras más confiables, seguros y fáciles de usar. Sus contribuciones pueden encontrarse en casi todos los lenguajes de programación modernos”.
Entre sus innovaciones, está el principio de sustitución de Liskov (LSP), formalizado en 1994, que dice cuándo es seguro sustituir un objeto de un subtipo por un objeto que es padre de este tipo, lo que previene comportamientos bizarros cuando el programa está corriendo.
Fuente: i-programmer