Uno de los mayores enemigos de las tarjetas de crédito son todos los tipos de fraudes en los que pueden caer, sobre todo en las compras por Internet, y aunque siempre se había planteado el uso de diferentes tecnologías de seguridad para las tarjetas, al parecer los franceses serán de los primeros en evolucionar la seguridad de sus tarjetas.
Con el fin de erradicar los fraudes que a diario sufren miles de tarjetas alrededor del mundo, los bancos se encuentran trabajando en conjunto con empresas de seguridad para desarrollar soluciones que puedan asegurar sus transacciones e información de sus cuentahabientes.
Es por ello que los principales bancos franceses han comenzado a probar un nuevo tipo de tarjetas bancarias tecnológicas llamadas MotionCode, desarrolladas por la empresa Oberthur Technologies.
Estas nuevas tarjetas inteligentes cuentan con un sistema, el cual cambia el código de seguridad —el famoso número de 3 dígitos que se encuentra en la parte posterior de la tarjeta— por uno nuevo cada hora, por lo que aunque los dígitos sean capturados estos perderán sentido ya que en menos de una hora habrán cambiado por una combinación diferente.
Esto es gracias a una delgada y pequeña pantalla electrónica la cual esta conectada a un diminuto procesador quien llevará la cuenta y generará el código nuevo cada 60 minutos, todo alimentado por una batería que tiene una autonomía de 3 años.
Pero lo interesante es que la tarjeta técnicamente no cambia en nada ya que de frente podría confundirse con cualquier otra, teniendo la misma resistencia que una tarjeta convencional al agua, dobleces y caídas.
Por el momento los primeros grupos bancarios que están entregando estas tarjetas son Société Générale y Groupe BPCE, dos de los grupos bancarios más importantes de Francia, quienes desde hace un año llevaban haciendo pruebas pilotos con grupos pequeños de usuarios.
Fuente: Networkworld