El nombre del nuevo OS X es “Yosemite”, y es el sucesor a “Mavericks” del año pasado. La parte central de este lanzamiento es la apariencia de la interfaz, que en general conserva la mayoría de los elementos tradicionales de la plataforma, pero ahora tiene transparencias, botones más “planos” e iconos renovados para el dock inferior de la pantalla desde donde se lanzan los programas.
La barra de notificaciones aparece desde el lado derecho de la pantalla y tiene u modo de calendario en el que se pueden ver los próximos eventos, además de otras áreas en las que hay información sobre cualquier actividad pendiente que haya. También se pueden incluir widgets de clima, hora, calculadora e incluso de información extra, como noticias deportivas.
La barra de notificaciones recuerda a la que se introdujo con iOS 7.
Para hacer una búsqueda, sólo se debe hacer clic en el icono de la lupa para obtener una barra en la parte central de la pantalla; al escribir un término en ese espacio, aparecerá un menú inferior con información práctica con datos obtenidos de la web y también de la memoria interna del dispositivo.
La búsqueda se activa fácilmente y muestra una ventana en la parte central de la pantalla.
Otra introducción importante es iCloud Drive, que ahora será una plataforma más flexible para tener contenido almacenado en la nube, accesible desde cualquier ubicación a través de la app dedicada, que incluso estará disponible en Windows.
En cuanto a Safari, el navegador nativo de Apple, tiene una función de exploración rápida con sugerencias al poner cualquier término en la barra de direcciones, además incluye un modo mejorado para compartir contenido con otras personas de manera simple. Este navegador ahora es compatible con WebGL y otros estándares para ver fácilmente cualquier tipo de página.
Safari tiene sugerencias rápidas de búsqueda.
Para quienes tienen un dispositivo móvil Apple, AirDrop, la función para establecer vínculos de contenido entre productos, funciona entre una computadora Mac y un iPhone o iPad.
A esto se suma una función llamada Handoff que permite comenzar a escribir un correo en el iPhone y terminarlo en la Mac, por ejemplo, aunque también se pueden realizar otras actividades para darles “continuidad” entre diferentes pantallas.
Finalmente, al usar iMessage se podrán ver los mensajes de texto SMS recibidos dentro de la interfaz tanto del iPhone como de Mac; incluso se podrá ver quién está marcando al dispositivo móvil en la pantalla de la computadora, así como contestar la llamada usando la bocina y micrófono de la máquina.
Asimismo, se puede llamar a algún número usando el iPhone de manera remota, sin importar que esté del otro lado de la habitación, y para quienes necesitan anclarse a la conexión móvil del teléfono para tener Internet en la Mac, ahora sólo tendrán que elegir el dispositivo del menú de WiFi.
La versión final del nuevo sistema operativo llegará en otoño y se podrá descargar de manera gratuita. Tanto desarrolladores como usuarios comunes pueden obtener acceso a la versión beta del sistema a partir de hoy.