En años recientes, muchos titulares se han engrosado con el llamado Apple Car a pesar de que este desarrollo está lejos de ser confirmado desde Cupertino.
Todo empezó cerca de 2014 cuando se supo que Apple estaba trabajando en un proyecto secreto conocido como Titan, el cual en tiempos más recientes se asoció con el presunto desarrollo de una auto completamente autónomo, sin volantes no pedales, programado para ser presentado durante 2025.
Los detalles sobre este desarrollo son pocos y el diseño que podría tener este rumoreado auto de Apple es un misterio.
No obstante, ahora una patente da algunas pistas sobre este último punto en donde «pocas o nulas ventanas» podrían ser factor en la apariencia del auto no confirmado.
A principios de mayo, la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos, concedió a la empresa tecnológica una patente para un sistema de realidad virtual diseñado específicamente para usarse en un vehículo autónomo.
En más de una ocasión Apple ha argumentado que en los vehículos autónomos, el conductor se convertirá en un pasajero más con opción a tener más ocupaciones en sus traslados, en donde actividades asociadas a la realidad virtual podrían ser cada vez más comunes.
¿Un Apple Car sin ventanas y realidad virtual?
No obstante, los sistemas actuales alrededor de esta tecnología podrían entregar una experiencia poco favorecedor.
Así, la patente de Apple propone una solución con un sistema de realidad virtual que hace coincidir las señales visuales con los movimientos físicos que experimenta el pasajero mediante efectos de aceleración en los asientos del coche.
A esto se suma la anotación Apple que indica que los autos autónomos en los que se aplicaría esta tecnología podrían tener “pocas o ninguna ventana”, y añade que al menos una ventana se podría usar para «proyectar fotogramas virtuales, proporcionando un entorno virtual en 3D desde la perspectiva del pasajero».
Es cierto que esto es solo una patente; sin embargo, revela algunas pistas sobre la visión de Apple alrededor de la conducción autónoma y las prestaciones que podría entregar en un vehículo propio.