Kenny the Clown o Kenneth Kahn, un payaso del Área de la Bahía en San Francisco, se llevó tremenda sorpresa al descubrir que su recién obsequiado iPad había pertenecido a Steve Jobs (1955–2011). El iPad, de 64 GB, fue un regalo de Kariem McFarlin, el detenido por haber robado bienes por más de 60 mil dólares en la que fuera la residencia del exCEO de Apple en Palo Alto, California.
“Sería como recibir un balón de futbol americano firmado por Joe Montana que fue robado de su propia casa”, dijo Kahn al medio San Jose Mercury News.
El iPad estuvo en sus manos durante 2 o 3 días antes de que la policía fuera por él. Hasta entonces sólo lo había usado para escuchar canciones de Michael Jackson y el tema de la Pantera Rosa durante su rutina para los niños.
McFarlin dijo que el otro de los iPads lo regaló a su hija. Según la policía, ambos dispositivos ya están en manos de la familia Jobs.
Kahn y McFarlin se conocieron en un equipo de basquetbol hace una década. Kahn se postuló para mayor de su pueblo en Alameda, California (de donde también es originario el ladrón), en 2006 y 2010; además, quiso ser alcalde de San Francisco en 2007. Sobra decir que no ganó.
Referencia: Wired